El twitteo precoz y la declaración rápida de los principales funcionarios del Ministerio de Seguridad le suele jugar una mala pasada constante al gobierno nacional. En apenas 9 meses de gestión, ya son varios los anuncios que debieron ser desmentidos públicamente minutos después. Ayer fue el turno del secretario de Seguridad de la Nación, Eugenio Burzaco, pero ya habían cometido errores similares la ministra Patricia Bullrich y Gerardo Milman, secretario de Seguridad Interior.

El falso terrorista islámico. Luego de anunciar públicamente que había detenido a un presunto terrorista libanés en la Triple Frontera, la ministra Patricia Bullrich debió dar marcha atrás sobre sus pasos ya que quien resultó apresado fue Khalil Mohamed El Sayed, de origen libio buscado por narcotráfico en Brasil. La confusión se produjo por una diferencia de una letra con un libanés buscado con el nombre Mohamad, con «a» y no con «e».

Los infiltrados. Un error similar había cometido la ministra en mayo, cuando anunció públicamente que la policía había detenido a una banda con bombas molotov en el barrio porteño de Belgrano que se dirigía a la Plaza de Mayo donde el presidente Mauricio Macri celebraba los actos por la Revolución de Mayo.

La policía federal la corrigió horas después: la banda detenida era en realidad de “quemacoches” y habían sido apresados muchas horas antes de los actos.

Triple fuga. La ministra es la que más errores acumula al ser la vocera natural de la cartera. Cuando apenas llevaba un mes en funciones, Bullrich tuvo que desmentir la detención de los tres prófugos del triple crimen. El propio Macri se vio involucrado esta vez y se plegó a la celebración de la captura, que resultó falsa, sólo habían logrado dar con uno de ellos.

Luego, la ministra atribuyó el error a una “falsa información” que recibieron.

Rincón del Vago. Gerardo Milman, secretario de Seguridad Interior de la Nación, también tuvo su momento. Por Twitter, copió datos del famosos portal Rincón del Vago para explicar las características de las Maras luego de la detención de un ex miembro de la mara Salvatrucha. Al descubrirse la trampa, no pudo evitar las burlas virtuales.