Más represión para los trabajadores que resisten por sus puestos de trabajo. En este caso fue contra aquellos del Hospital Posadas, de Cresta Roja, de Pepsico, del INTI, de Ferrobaires y de Yacimientos Carboníferos Río Turbio que son los protagonistas de una de las marchas que reclaman en el centro porteño por los despidos en sus empresas. La movilización, convocada por ATE Nacional, se realiza “contra las políticas de ajuste, los techos salariales y la represión”, y por la CTA Autónoma con la carpa “de los trabajadores y trabajadoras que luchan” instalada en el Congreso.

Mientras los mineros se dirigían al Congreso, la policía comenzó a reprimir y detuvo a uno de los trabajadores que recorrieron cerca de 3.000 kilómetros para buscar una solución a los 500 despidos y frenar la promesa del interventor de la empresa de echar más gente. Uno de los trabajadores relató la situación: “Estábamos organizados pacíficamente para que no haya ningún percance y de repente nos cercaron y nos empezaron a pegar y nos tiraron gas pimienta y nos golpearon. Detuvieron al compañero (Ernesto) Uribe y no nos vamos a ir hasta que lo liberen.” La policía informó que el arresto se produjo “por atentado y resistencia a la autoridad”, pero el relato de los manifestantes contradice esta versión, y dicen que “hubo una orden evidente de reprimir”, ya que no había ningún incidente cuando actuó la policía.

“Gritá tu nombre”, le pedían los que estaban cerca del lugar de la detención, grito que se realiza desde el momento en que a policía levanta manifestantes al azar sin dar información sobre el destino al que se lo lleva y también por la negativa a informar la identidad del detenido por parte de las autoridades.

La diputada del FIT Natalia González le dijo al canal C5N: “Dijeron que los trabajadores los habían provocado pero yo vi cómo fue todo y la iniciativa la tomo la policía, de hecho hay policías de civil que han cazado al trabajador”.

Si bien la movilización se dirigía a Congreso, la represión contra los mineros hizo que las columnas se quedaran en 9 de Julio y Av. de Mayo a la espera de tener noticias de su compañero detenido.

La Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) realizará una feria de la economía popular en la Plaza Congreso para “visibilizar la situación crítica que vive el sector a partir de los recortes del gobierno de los programas de trabajo, y exigir que se defienda el trabajo y no se ajuste sobre el sector más vulnerable”. Por su parte, Christian Gordillo, secretario adjunto de ATE Río Turbio, declaró a AM 750 que “esta política está vaciando los pueblos.”

Otra manifestación que se realizaba al mismo momento es la de los taxistas contra la empresa / aplicación Uber. En este caso el gremio de Omar Viviani ha movilizado más de cuatro mil vehículos que se encuentran estacionados a lo largo de la 9 de Julio desde la calle Sarmiento hasta Avenida Independencia, aunque la medida no incluye intervenir el corredor del Metrobus.

El líder del sindicato, Omar Viviani, declaró a la prensa que “hay una decisión judicial, falta la acción de la política. Uber es ilegal pero como no tiene sede física, se complica.” Además el gremialista señaló que “en los últimos dos años, el ingreso a los taxistas se redujo un 40 % por la crisis y por el tema Uber. El taxi es una actividad blanqueada que no puede competir con ora que está totalmente en negro.” El gremialista hablando frente a la multitud de taxistas responsabilizó al gobierno nacional y de la ciudad “por hacerse los distraídos” frente a este tema.