El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, cargó contra el secretario general de la OEA, Luis Almagro y la propia Cancillería. Por el apoyo a Sala que expresó Almagro en una carta al gobierno nacional, lo acusó de «hacer kirchnerismo explícito» y lo conectó con el FPV por «levantar la bandera de que hay presos políticos». Según el mandatario jujeño el objetivo oculto del funcionario es impedir que la Justicia avance en investigaciones contra la ex presidenta Cristina Fernández.

En esa carta, el secretario general de la OEA reclamó la inmediata liberación de Sala, en un pedido similar al que hizo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Además apuntó sbre la propia Cancillería del PR, ya que en su opinión «tiene dudas» sobre el caso Sala, y opinó que eso «no ayuda a refutar las críticas internacionales».

En una entrevista que el Gerardo Morales concedió a Télam minimizó los pronunciamientos de la ONU y afirmó que hasta el momento se trató de «opiniones que terminan favoreciendo el clima de impunidad que quiere el kirchnerismo». Además de la carta, el gobernador se decidió a hablar luego del reclamo de intervención a los tres poderes de la provincia por el caso Sala:
«Eso dejó al descubierto su verdadera intención: Levantar la bandera de que hay presos políticos descalifica cualquier acción de la justicia que eventualmente pudiera ir sobre la responsabilidad de Cristina Kirchner.»

–¿Hubo errores judiciales en el caso Sala?
–La justicia actuó bien. Ella no está presa por un acampe sino por robarse 29 millones de pesos, y la gente vio el video de cómo su gente se llevaba los bolsos con plata del banco. Eso fue la semana antes de que yo asumiera, pero en todo el año habían sacado 350 millones de pesos de la misma manera. Estamos hablando de que los allanamientos en la casa de Sala se encontraron 30 bolsos y una máquina de contar billetes. El tema me parece tan burdo que el hecho de que el FPV pida la intervención para frenar esa investigación es algo gravísimo para el país.

–¿Se arrepiente de algo después de las críticas que recibió por el caso?
–Para mí, Sala es la punta del iceberg de una matriz sistémica de corrupción nacional de la que formaban parte ella, José López, Lázaro Báez y la propia Cristina Kirchner. No me arrepiento de haber restablecido el cumplimiento de ley y de dar garantías de derechos a todas las personas que terminaron en la peor de la esclavitud: el clientelismo violento.

–¿A la cancillería le faltó aclarar el tema ante los organismos internacionales?
–La cancillería tiene dudas. Y eso no ayuda. Jujuy ya informó todo lo que tenía que informar. Ahora todos deberían leer las causas completas y hablar con los jueces, sobre todo los organismos internacionales.

–T: En la calle la gente se queja de que la plata no alcanza.
–Fue un año difícil, pero tratamos de mantener la trama social de las organizaciones y lo hicimos en un 90 por ciento. Nuestro desafío fue la paz y la unión, y dimos un paso importante. Ahora necesitamos más trabajo, nos va a llevar tiempo. Nuestra prioridad es fortalecer la producción y los pequeños emprendedores.

–¿Y cómo califica el primer año de Macri?
–Fue bueno, se tomaron medidas saludables, aunque algunas fueron duras, pero el año próximo tiene que ser mejor. Nosotros sentimos mucho el acompañamiento del Gobierno. Trabajamos juntos.