El ex secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, solicitó este lunes ante la Cámara Federal porteña que el juez Claudio Bonadio sea apartado de la investigación de los cuadernos por “temor de parcialidad”, dado que existe una vieja tensión entre el instructor y el investigado. Fuentes judiciales estimaron el planteo del ex funcionario kirchnerista no tendrá éxito.

La presentación de Parrilli fue realizada por la mañana en los tribunales federales de Comodoro Py por sus abogados Roberto Boico y Aníbal Ibarra, justo al mismo tiempo en el que la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner presentaba su descargo por escrito en el juzgado federal a cargo de Bonadio. Los dos escritos fueron en la misma dirección.

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Boico e Ibarra defendieron su presentación ante el juez de la sala I, Leopoldo Bruglia, quién deberá decidir de manera unipersonal si le da la razón a Parrilli y aparta a Bonadio u opina como el juez –que ya rechazó la recusación en su contra- y lo deja al frente de la investigación.

La defensa de Parrilli planteó ante la Cámara que Bonadio no puede estar al frente de la causa porque existe una denuncia previa que él le presentó por su accionar «arbitrario» en el marco de otro expediente, lo que podría nublar la objetividad y la imparcialidad del juzgador. El ex funcionario kirchenrista había denunciado al juez por no notificarlo de medidas que había adoptado en relación a una propiedad suya en el marco de la causa conocida como Casa de la Moneda, que data del año 2016.

En el segundo piso de los tribunales federales de Retiro los abogados del también ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia recordaron que Bonadio no solo fue denunciado judicialmente por Parrilli sino que también tiene un pedido de juicio político ante el Consejo de la Magistratura.

En su defensa, el juez Bonadio había sostenido días atrás que las denuncias en su contra son posteriores al inicio de la causa de los cuadernos de Oscar Centeno, el ex chofer de Roberto Baratta. Para sostener eso el magistrado remarcó que la causa de los cuadernos no se inició este año sino que su fecha de apertura tiene que buscarse en 2014, cuando comenzó la investigación por supuestos sobre precios en la importación de Gas Natural Licuado.

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La investigación de los cuadernos se inició en abril de este año luego de que los presentara en la justicia el periodista de La Nación Diego Cabot. Las fotocopias de los escritos en los que se describa una supuesta red de corrupción que unía a empresarios con ex funcionarios fueron presentadas en la fiscalía de Carlos Stornelli. El representante del Misterio Público dio los primeros pasos en la investigación y en lugar de mandarla a sorteo decidió presentársela al juez Bonadio. Ambos tenían en su poder el caso GNL.

El motivo que arguyeron para quedarse con el expediente y trabajarlo como si fuera conexo a la causa del Gas Licuado, que sí data del 2014, es que figuraban en los cuadernos tres imputados que también estaban en la otra causa: Baratta, el ex ministro de Planificación, Julio de Vido; y el ex titular de Enarsa, Walter Fagyas. Nada más. Lo cierto es que por el caso de los cuadernos ya hay más de 38 imputados, varios de los cuales aparecen mencionados en otros expedientes que tramitan ante otros juzgados.