La multinacional Pepsico, a través de sus dueños locales, pidió a la Justicia que desaloje la planta que se encuentra tomada pacíficamente por los trabajadores, según les informó la fiscalía a cargo. Mientras luchan por el sostenimiento de 600 puestos de trabajo emitieron un comunicado en el que denuncian el violento pedido de la compañía.

“Esto lo hacen en momentos en que cierran el expediente fraudulento del Procedimiento Preventivo de Crisis –con la anuencia del Ministerio de Trabajo– para redoblar la presión a los trabajadores para que firmemos acuerdos voluntarios de retiro o directamente para despedirnos”, denunciaron los trabajadores.

“Se trata de un pedido temerario de una empresa que está en la ilegalidad más abierta y que ya fue denunciado por lockout ofensivo, vaciamiento y discriminación. El fiscal de la causa en principio se expidió a favor del pedido. Resta saber la resolución del Juzgado de Garantías», agregaron los trabajadores. Asimismo, anunciaron que pese al pedido de la firma y de la posible aceptación por parte de la Justicia, no abandonarán «la lucha por amenazas represivas ya que reclamamos nuestros puestos de trabajo, destruídos ilegalmente»

“Llamamos a la solidaridad a todos los trabajadores, a los gremios que nos apoyaron estos días, a los organismos de DDHH, Legisladores y organizaciones políticas y estudiantiles y estar alertas y movilizados para impedir una resolución violenta y represiva a una lucha por el derecho elemental de poder alimentar a nuestras familias a partir de nuestro trabajo», agregaron.

Por todo esto, convocaron para el sábado a las 14, en la sede de Posadas al 1200, en el partido de Florida, a “las diferentes organizaciones y compañeros despedidos de otras firmas, a acompañarnos en este momento”; y para “el lunes próximo a las 11 al Juzgado de Garantías Garantías N°3 en Ituzaingó 340 de San Isidro”, donde reclamarán en contra del «próximo desalojo y el temor frente a una eventual represión».