El argentino Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, postuló ante el comité noruego al presidente de Bolivia depuesto por el golpe del año pasado, Evo Morales, para ese galardón en su edición 2020.

Pérez Esquivel, quien recibió ese premio en 1980 por su lucha contra las dictaduras latinoamericanas, comparó el enfrentamiento del dirigente aymara refugiado en Buenos Aires, contra los poderes fácticos de hoy.

“Evo también es un símbolo de resistencia contra la nueva Operación Cóndor que hoy realiza golpes militares, mediáticos y judiciales, para proscribir partidos políticos y candidatos que logran alta intención de voto porque implementan políticas soberanas a favor del pueblo”, escribió Perez Esquivel en un comunicado difundido hoy en sus redes.

En su escrito dirigido al comité del Nobel, el postulador destacó que durante los 14 años de gobierno de Morales hubo en Bolivia “cambios estructurales que afectan intereses de élites que no quieren que cambien las cosas. Esas élites intentaron derrocar al gobierno legítimo y legal de Evo Morales en varias oportunidades. Esos intentos finalmente se consumaron el 10 de noviembre de 2019. Evo Morales prefirió renunciar para evitar que se produjera un enfrentamiento”, destacó Pérez Esquivel.

Además, hizo  énfasis en el hecho de que “el gobierno golpista perpetró masacres y actualmente ha desatado una persecución sistemática en contra de exautoridades del gobierno depuesto”.

“Estoy convencido -afirma Pérez Esquivel- que el Premio Nobel de la Paz para Evo Morales Ayma será un justo reconocimiento y un acicate a la lucha por la inclusión, por la erradicación de la pobreza y por el desarrollo sostenible”.