La justicia negó el beneficio del 2×1 a Francisco Gómez, apropiador del nieto restituído Guillermo Pérez Roisinblit.

“Abuelas de Plaza de Mayo celebra la decisión del Tribunal Oral Federal N° 5 de San”, anunció la organización a través de un comunicado en el que destacaron que los tribunales “sigan comprendiendo la gravedad de los delitos cometidos por los genocidas”.

Francisco Gómez fue el apropiador del nieto Guillermo Pérez Roisinblit fue condenado en septiembre de 2016 a doce años de prisión por la privación ilegal de la libertad y los tormentos sufridos por los padres de Guillermo y su hermana Mariana.

“Creo que es una buena resolución. Había dos planteos dando vueltas, uno era la aplicación del precedente Muiña para que se compute el 2×1, por lo que pedían la excarcelación por un lado, y por el otro, la aprobación de la prisión domiciliaria. Cada planteo tenía sus fundamentos pero ambos fueron rechazados”, explica Pablo Lachener quien llevó adelante la causa.

El Tribunal Oral Federal 5 le dio lugar a la voz de las víctimas para analizar la resolución e indicó que existían “riesgos procesales para otorgar el beneficio de la prisión domiciliaria al represor”.

“Lo más destacable de este proceso fue el modo en que se les dio la intervención a las víctimas. Si bien hay una nueva ley que se sancionó el año pasado donde se plantea la cuestión de la intervención de las víctimas, no está aún reglamentada, por lo cual queda a criterio de cada juez”, agrega el abogado. “Esto es algo novedoso porque acá no es que estuvieron en juego argumentos jurídicos si no que se buscó escuchar la opinión de Guillermo por un lado, de su hermana y de la abuela Rosa. Esta fue la característica principal de este proceso, más allá de la resolución que para nosotros está ajustada a derecho”.

Los pedidos que había realizado la defensa estaban centrados en el cumplimiento de la edad –de más de 70 años– y por algunas dolencias físicas que se comprobó, eran tratables por el servicio penitenciario. Es decir que no se aplicaban los requisitos que pide el código para que se cumpla el beneficio.

“No hubo un argumento jurídico novedoso, lo importante fue la participación de las víctimas. Es importante resaltar eso porque ellos intervinieron directamente, no es que hubo argumentos jurídicos o alegatos de los abogados a pesar de que expusimos nuestros argumentos jurídicos pero ellos pudieron también fundamentar con sus palabras el rechazo. En general sólo se escuchan a los abogados no a las víctimas”, aclara Lachener.

Acera de la aplicación del 2×1, el abogado afirma que los tribunales han manifestado en general su rechazo al 2×1. “Hay muchos antecedentes jurisprudenciales. Siempre que no sean fundamentos arbitrarios en general no están haciendo lugar al planteo del 2×1. Y en el caso de la prisión domiciliaria, desde Abuelas siempre tuvimos un criterio de caso por caso. A veces sí procede la domiciliaria: enfermedades terminales o cuando la persona está psíquicamente incapaz de entender lo que está sucediendo en general no nos oponemos a la prisión domiciliaria”.

En su cuenta de Twitter, Guillermo Pérez Roisinblit escribió “El alivio que mi familia y yo sentimos por esta decisión es inimaginable”. El nieto restituído manifestó más de una vez a través de las redes sociales su repudio al pedido de la defensa. Lerecher pudo hablar luego de haber recibido la noticia del rechazo del tribunal. “Hablé con Guillermo. Es importante porque fue escuchado en el marco del expediente judicial pero también hizo pública su oposición. No es un asunto menor escuchar a las víctimas es importante que se haya cumplido y eso y se haya respetado», finalizó Pablo Lachener. 

Pérez Roisinblit había denunciado la amenaza de parte de su apropiador. «Algún día voy a salir y les voy a poner una bala en la frente a vos, a tu hermana y a tus abuelas».

Guillermo es hijo de José Manuel Pérez Rojo y Patricia Julia Roisinblit. La pareja estuvo secuestrada en una casona de Morón al mando de la Regional de Inteligencia de Buenos Aires (RIBA), órgano de espionaje y centro clandestino de detención de la Fuerza Aérea. Por testimonios de sobrevivientes, se supo que Patricia, la mamá de Guillermo había sido trasladada a la Esma donde el 15 de noviembre dio a luz un varón al que llamó Rodolfo Fernando, en un parto asistido por el obstetra del Hospital Naval, Jorge Luis Magnacco.

En abril de 2000, Abuelas de Plaza de Mayo recibió una denuncia anónima donde afirmaba Francisco Gómez (agente civil de la Fuerza Aérea) y su esposa Teodora Jofré tenían un hijo inscripto como propio con una partida de nacimiento falsa. Luego de ser visitado por su hermana, el joven aceptó realizarse los análisis inmunogenéticos que dieron como resultado la filiación de con las familias Pérez Rojo y Roisinblit.