Los becarios agrupados en Jóvenes Científicos Precarizados (JCP) y otras organizaciones gremiales y estudiantiles decidieron anoche mantener la toma del hall central del Ministerio de Ciencia y Tecnología, luego de que la asamblea rechazara una propuesta que les hicieron llegar las autoridades durante la tarde del miércoles.

El gobierno nacional mantiene la negativa a incorporar a los casi 500 becarios ya evaluados a la carrera de investigador del Conicet. Ayer ofreció, a cambio, insertarlos en distintas universidades nacionales e institutos descentralizados de ciencia y técnica, y mientras se concretaba esa distribución de recursos e investigadores, extender hasta el 30 de marzo las becas posdoctorales. Al cabo de más de tres horas de asamblea, la propuesta fue desestimada por los becarios. 

La jornada había comenzado a las 10, cuando los delegados de las agrupaciones que llevan adelante la toma comenzaron a esperar, en vano, que los recibiera el ministro Lino Barañao. Ante la falta de respuesta, los trabajadores del sector científico anunciaron en conferencia de prensa, pasado el mediodía, que continuarían la ocupación del ingreso al edificio de la cartera científica, que arrancó el lunes y que este jueves habrá cumplido 72 horas.

A media tarde, sin embargo, los becarios Lucía Maffei y Alejandro Muntó, integrantes de JCP, tuvieron un breve encuentro con el gerente de Asuntos Legales del Ministerio, Alan Temiño, y con Jorge Aguado, subsecretario de Políticas en Ciencia y Tecnología, quienes les trasladaron la propuesta que la asamblea de trabajadores empezó a debatir cerca de las 20.

El rechazo al inconsistente ofrecimiento del gobierno nacional será expresado a las autoridades este jueves a las 10 de la mañana, y prolonga un conflicto que atañe directamente a medio millar de becarios, pero cuya resolución pone en juego una cuestión clave: cuál es el lugar que ocupa la ciencia en el modelo de país que pretende la gestión Cambiemos.

Antes, frente a más de mil trabajadores del ámbito científico que adhieren al repudio al ajuste presupuestario en el Conicet, Alan Szalai, de JCP, había repasado desde la explanada que da a la calle Godoy Cruz las medidas que llevaron a este conflicto. Explicó que los casi 500 becarios que se presentaron a concurso para la carrera de investigador y fueron evaluados favorablemente, y que hoy no ingresan al Conicet por el recorte presupuestario en Ciencia dispuesto por el gobierno de Mauricio Macri, son en realidad “despedidos”, en la medida en que concursaron luego de siete años de trabajo precario, con becas doctorales y posdoctorales.

De los 874 becarios altamente calificados que fueron evaluados por comisiones y juntas, sólo están ingresando 385. “Acá vamos a seguir hasta conseguir lo que vinimos a buscar, que es el ingreso de los trabajadores a la carrera para apoyar el desarrollo científico del país, y que no tengan que emigrar al exterior para continuar sus carreras”, dijo Szalai.

Lucila D’Urso, también becaria e integrante de JCP, tomó luego la palabra y explicó que “la toma pacífica del Ministerio, tal como se votó en asamblea, se mantiene hasta que ingresen los 500 trabajadores”. Reveló que las autoridades del Ministerio comunicaron que no los recibirían hasta tanto se levantara la ocupación del hall.

Bajo un sol incandescente, recrudecieron las críticas a Barañao y a Alejandro Ceccatto, presidente del Conicet. “Si todavía tienen algo de amor por la ciencia, como tenían cuando eran jóvenes, les pedimos que renuncien”, dijo una delegada de la Junta de ATE del Ministerio.

Acaso el momento más significativo de la improvisada conferencia de prensa fue la intervención del físico Juan Pablo Paz, quien en ese mismo lugar, en 2015, recibió el premio al “Investigador de la Nación” mientras se inauguraban las nuevas instalaciones del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva. “Este no es un reclamo ideológico ni corporativo, es un reclamo de toda la comunidad científica, que cuestiona un ajuste que significa dejar de apostar a la ciencia para el desarrollo productivo del país”, dijo Paz.

Paz reivindicó la carta que le entregaron ayer los ganadores de los premios Houssay al jefe de Gabinete Marcos Peña (Macri, que estaba en la Casa Rosada, no asistió al acto de premiación), en la que rechazan los recortes en el área. Y contó que él mismo motorizó entre todos los científicos que alguna vez recibieron esos y otros galardones, como los Konex, que adhirieran a esa carta.

“Los becarios esperan ser recibidos. Nadie los recibe. Prestigiosos científicos premiados adhieren al reclamo. Tampoco se dialoga con ellos –cerró el físico–. Yo me pregunto: ¿Con quién dialoga el ministro Baraño? ¿A quién recibe?”.