La policía francesa reprimió con violencia una protesta en Nantes por la muerte de un joven que murió ahogado el 22 de junio en el río Loira y cuyo cuerpo apareció esta semana. Steve Canico tenía 24 años y participaba de la Fiesta de la Música en esa ciudad del oeste de Francia, al borde del río,  cuando efectivos policiales arremetieron contra la multitud para obligarlos a terminar con el evento. Un informe del gobierno local afirmó que los uniformados fueron recibidos con palos y piedras, pero admitió que hubo gases lacrimógenos, balas de goma y granadas aturdidoras. En la persecución, varios jóvenes cayeron al agua. Catorce de ellos fueron rescatadas por los socorristas.

Pero Steve Maia Caniço no sabía nadar. Su cuerpo fue encontrado en el río Loira, este martes 30 de julio, 38 días después de su desaparición. Algunas horas después, se conmemoraban en Argentina los dos años de aquél 1 de agosto de 2017 en que se vio por última vez con vida a Santiago Maldonado. Impresionan ciertas coincidencias en ambos casos.

En Francia, desde la madrugada del 22 de junio, aparecieron inscripciones en muros y pancartas en las calles de Nantes y en otras partes del país, en las que se preguntaba «¿Dónde está Steve?» Cientos de manifestantes formaron una cadena humana el 20 julio a lo largo del Loira para reclamar «Justicia por Steve». Diez días más tarde fue encontrado  allí un cuerpo que de acuerdo a las pericias, era el del muchacho. El fiscal de Nantes, Pierre Sennès, indicó que se había abierto una investigación judicial por el cargo de homicidio involuntario.

La policía francesa afirma que no hubo «ninguna carga» contra los asistentes al festival y alegan que fueron atacados con proyectiles. Actualmente hay varios acciones judiciales en curso, incluida una investigación administrativa conducida por la Inspección General de la Policía Nacional francesa (IGPN), llamada la «policía de las policías», y cuyas conclusiones deberían publicarse esta semana. Pero la explicación de las autoridades enfureció aún más a los familiares y amigos de Canico: para el primer ministro Edouard Philippe, la intervención policial estuvo “justificada” y no hay elementos que permitan determinar que algún miembros de la fuerza estaba relacionado con la desaparición del joven. Otra coincidencia con el caso que conmovió a la Argentina.

Ayer, una multitud marchó por las calles de Nantes al grito de «¡Asesinos!», «Todos odian a la policía», «La policía mutila, la policía asesina», y homenajearon a Caniço. Varias partes de la ciudad amanecieron cerradas con la excusa de impedir la presencia de miembros del grupo antisistema conocido como Black Bloc (El bloque negro), que adhiere a las marchas de los Chalecos Amarillos, el movimiento de protesta antigubernamental que dominó durante semanas el debate político en Francia. Ayer los Chalecos pidieron un minuto de silencio en París en una nueva protesta contra el gobierno de Emmanuel Macron y reclamaran contra la brutalidad policial. El 14 de julio, al celebrar un nuevo aniversario de la Toma de la Bastilla, habían sumado a sus consignas una para reclamar por la aparición de Steve. ‘Justicia para Steve’, ‘Descansa en paz Steve’ y ‘Ni olvido, ni perdón’, corearon ayer. «