La huida intempestiva del ministro Luis Caputo de la bicameral de Seguimiento y Control de la Deuda tiene una simple razón: no podía explicar su relación con sociedades offshore, ni la compra de dólar futuro que realizó Axis, ni su intento de ingresar al blanqueo. Y en lo poco que intentó explicar, mintió. Y fue evidente.

Caputo no presentó papeles que sustenten sus falacias. Nosotros sí tenemos los documentos que demuestran sus delitos.

Respecto a Noctua, Caputo dijo en la comisión que era el “tenedor fiduciario”, un testaferro legal, alguien “de confianza de otra persona”. Caputo mintió, o le mintió a la SEC, la Comisión Nacional de Valores estadounidense, ante quienes declaró que era accionista. En los documentos que Noctua presentó a la SEC no hay ninguna referencia a un trust (fideicomiso) o un trustee (fiduciante). Además de a la justicia argentina, el ministro le deberá dar explicaciones a la justicia norteamericana. Y cuando surgieron los Paradise Papers, a los diarios Perfil y La Nación les dijo que era un “manager o asesor de inversiones”, nunca habló de tenedor fiduciario. Caputo miente sistemáticamente.

Su explicación de que no declaró su participación en Noctua -y otras offshore como Affinis y Princess- porque era nuevo en la función pública y no sabía cómo llenar una declaración jurada es otra tomada de pelo. Que alguien desconozca la ley no lo hace inocente de los delitos que cometió. Caputo no solo omitió esto, sino que en la comisión no dio el nombre del supuesto verdadero dueño de Noctua, ni dijo quiénes eran los “familiares y amigos” –como declaró a la prensa- cuyos fondos manejaba Alto Global Fund.
(Ver documentos 1 a 4)

Caputo también mintió cuando dijo que se había desprendido de sus tenencias en dólar futuro en octubre de 2015, antes de asumir la función pública. Entre octubre y diciembre de ese año Axis (la firma que Caputo constituyó en abril de 2012 y presidió hasta el 4 de diciembre de 2015) compró 700 millones de pesos en contratos de dólar futuro, es decir, cuando ya sabía que Cambiemos podía ganar las elecciones y él convertirse en secretario de Finanzas. Después, el 13 de diciembre, a días de asumir, Caputo junto al vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, fijaron el valor de esos contratos en un 50% más. Como consecuencia de esta operatoria Axis, que en 2014 había ganado 9 millones de pesos, reportó en 2015 ganancias por 194 millones de pesos. (ver documentos 5 a 11)

Su escandalosa huida de la comisión dejó además otras cuestiones sin explicar. Una de ellas es su intento de blanquear los fondos que él y Mario Quintana, tienen en negro en el exterior. En los primeros meses de 2016, el gobierno envió el proyecto de blanqueo de capitales que se convirtió en la Ley 27.260, y que en sus art. 41 y 42 permitía la repatriación sin pagar ninguna penalidad si se direccionaban los fondos a proyectos productivos. Amparados en esa norma, entre el 23 de agosto y el 4 de noviembre de 2016 se crearon los fondos “Axis renta en dólares ley 27.260”, “Axis energía ley 27.260”, “Axis Rukan Pegasus I fondo común cerrado inmobiliario ley 27.260” y “Axis Pegasus I fondo común de inversión cerrado para proyectos de capital cerrado 27.260”. Axis es Luis Caputo y Pegasus es Mario Quintana. ¿Intentaron aprovechar el programa para blanquear dinero proveniente de la evasión de impuestos y la fuga de capitales?
(ver documentos 12 a 15)

Tampoco llegó a explicar su relación con Enrique Bruchou, Carlos Eduardo Lombardi y Hugo Nicolás Bruzone, todos socios del estudio Bruchou, Fernández Madero y Lombardi, que fueron los síndicos del Deutsche Bank cuando Caputo presidía la entidad. El estudio Bruchou, Fernández Madero y Lombardi participó en la colocación de 59.397 millones de dólares de deuda pública desde que asumió el gobierno de Cambiemos, obteniendo millonarias sumas por honorarios.
(ver documentos 16 a 18)

Link para descargar los documentos:
https://drive.google.com/open?id=1a8oD_1OJ1JQSYj1rFZqxndWvIkHbIwun