El abogado Maximiliano Rusconi, uno de los presuntos “objetivos” del espía ilegal Marcelo D’Alessio, le  pidió al juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, que identifique los teléfonos fijos y celulares que utilizó el fiscal Carlos Stornelli desde enero de 2016 a hoy y preserve toda la información contenida allí, en el marco de la investigación por la presunta asociación ilícita por la que el representante del Ministerio Público está llamado a indagatoria para este martes.

Lo hizo ante el “riesgo cierto y concreto de estar frente a la posibilidad de que parte de la prueba esencial para este proceso pueda ser ocultada o destruida». Rusconi recordó que el periodista Daniel Santoro, quien aparece reiteradamente mencionado en relación con D’Alessio, dijo públicamente en un reportaje para el diario Perfil que, sospechando que sería allanado, borró de su teléfono celular todas sus comunicaciones y chats con abogados, jueces y fiscales .

Rusconi invocó, ante ese escenario, “la necesidad urgente de disponer una serie de medidas tendientes a asegurar el material probatorio que pudiera existir respecto del presunto accionar ilícito” de Stornelli. En ese sentido, pidió al juez que “se identifique la línea telefónica de Stornelli que habría sostenido conversaciones con Marcelo D’Alessio”, así como “la totalidad de las líneas que pudieran haber pertenecido a Stornelli durante el período investigado, cuanto menos desde enero de 2016 en adelante”.

El pedido de prueba, que tiene carácter de “urgente”, incluye “las líneas telefónicas correspondientes a la fiscalía federal número cuatro, fijas o móviles” y que “se requiera a la Dirección de Asistencia Judicial del PJN arbitre los medios que fueran necesarios para que la empresa de telefonía que corresponda aporte el registro de llamadas entrantes y salientes, con su correspondiente impacto de antena, de los números identificados en el período indicado”. Las compañías de telefonía, a su vez, deberán garantizar “la urgente preservación y aporte de los datos técnicos que hacen a la mensajería móvil que pudiera haberse realizado desde aquellas líneas, el aporte y preservación”. 

Si bien el escrito no lo indica puntualmente,  Stornelli debería entregar (o el juez secuestrar) su teléfono celular para “la realización de una copia forense  de los equipos telefónicos del fiscal”, lo mismo que “del resto de los imputados sobre los que pudiera caber la posibilidad de riesgo, a efectos de asegurar dicha prueba como elemento probatorio”.

Rusconi fue aceptado como querellante por el juez Ramos Padilla porque a raíz de un artículo que escribió en el diario Página 12 fue eje de un chat entre D’Alessio y Stornelli. El 28 de diciembre de 2018, Stornelli le envió a D’Alessio el link de una columna de opinión firmada por Rusconi y titulada “Jueces propios y vergüenza ajena”.

-“Todo el texto tiene correcciones de puño realizadas por la señora CFK”, respondió D’Alessio.

– “Sí Pero lo que tenemos es una vacuna La sota mostró los pies”, completó Stornelli.

Poco más tarde, Stornelli le envía un nuevo mensaje a D’Alessio: “El que escribe tuvo y no sé si tiene relación con algún servicio. Local, claro. El y dos o tres más están tratando de hacer porquerías”.

El falso abogado le contesta que conoce a Rusconi y tras una alusión a supuestos vínculos con servicios de inteligencia remata: “Son gente de mierda”.

La respuesta de Stornelli fue corta y contundente: “Sí”.