Como parte de su faceta como actor y productor en el ámbito de la comedia, mañana llegará a las pantallas locales El Futbol o yo, el nuevo film protagonizado por Adrián Suar y Julieta Díaz.


Dirigida por Marcos Carnevale, la película sitúa a la dupla en el contexto de una pareja con veinte años de casados y dos hijas adolescentes que experimentan diferentes situaciones conyugales no resueltas. Suar interpreta a Pedro, un fanático del fútbol que no se pierde un partido (sea local o internacional, de los importantes o de los otros) y que sufre una suerte de adicción incontrolable por un deporte que afectará a su relación de pareja y familia. “A mí el tema me toca de cerca porque soy un fanático del deporte, pero no tanto como el personaje, que es capaz de ver un partido de dónde sea y a cualquier hora, inclusive en su trabajo”, dice Suar acompañado por Julieta Díaz y el director de la película algunos días antes del estreno formal de la nueva producción de Patagonik.

El otro polo de El futbol o yo lo constituye el personaje de Julieta Díaz. A punto de cumplir 40 años, ella siente que su vida se encuentra en una situación de no progreso personal. “Me identifico con mi personaje –dice Julieta- en el hecho de ver los problemas sólo en el otro y echarle la culpa. Lo que me gusta de esta película es que en ningún momento toma partido por ninguno de los dos. Pero queda claro que soy yo la que en un momento se cansa de la situación de fútbol permanente y le dice a Pedro que es ella o la pelota”.

El fútbol o yo llegará a los cines rodeada de una controversia que despertó todo tipo de comentarios. Semanas atrás, el periodista y escritor Daniel Frescó, autor de la novela Enfermo de Fútbol (editada en 2015 por Planeta) giró una acusación de plagio contra Suar (en su calidad de productor y coguionista) y Marcos Carnevale como director y guionista del film. Consultado sobre y en su caracter de actor, productor y guionista del film, Suar se limitó a cederle la palabra al director del film: “Me llegó una película belga que se llama Soy fan del Standard de Lieja, que es una comedia de Riton Liebman estrenada en 2013. Le comenté a Adrián sobre la idea de trabajar con una adaptación y a él le gustó. Trabajamos sobre la idea de un futbohólico que acudía a buscar ayuda, al mismo tiempo que esa adicción generaba un conflicto en su pareja. Pagamos los derechos de esa película belga y comenzamos a filmar. No hay animosidad de plagiar a nadie porque no lo necesitamos. Futboleros hay miles en todo el mundo, y ser un futbolero no es una idea. No leí el libro de Frescó, ni lo conocemos. Entiendo que encontró similitudes basadas en un tráiler. De nuestra parte y de buena fe tengo que decir que no hemos plagiado nada. La única similitud es la del futbolero y sobre todo lo demás no sé qué decir”, afirmó Carnevale.  

En relación al sensible momento que vive la ficción nacional, especialmente luego del levantamiento Fanny, La Fan por parte de Telefe, Suar sostuvo que “cuesta mucho hacer ficción y que duele tomar la decisión cuando hay que sacar una tira del aire. Por un lado está el tema de los costos, cuando ves que el canal pierde plata, pero también está el lado emocional al momento de hablar con los actores». En sintonía con lo afirmado por su compañero, Díaz fue más elocuente con respecto a la problemática al afirmar que “hay que encontrar la manera desde lo cultural o lo legal. Debería haber una política de Estado con respecto a este problema”, concluyó.