Los trabajadores sabían que las pruebas que demostraban, al menos, la negligencia de parte de las autoridades de Subterráneo de Buenos Aires (SBASE) y Metrovías existían en los manuales técnicos de los vagones CAF 5000 adquiridos por la empresa en 2011.
Sin embargo, en una entrevista realizada por la periodista de Perfil y CNN Argentina Emilia Delfino, fue el propio Eduardo de Montmollín, titular de SBASE, quien difundió los manuales que taxativamente señalan la existencia de asbesto en las formaciones cuando, en momento de la operación de compra, la sustancia ya estaba prohibida en la Argentina y en la inmensa mayoría de los países del mundo.
Para el legislador Gabriel Solano, que presentó hace poco más de un mes un pedido de informes a la legislatura que fuera aprobado el pasado 10 de octubre, se trata de una “confesión de partes” y que, por lo tanto, el funcionario “debe presentar la renuncia de forma inmediata”
Para el ahora candidato a Jefe de Gobierno por la izquierda en la Ciudad también “debe investigarse las responsabilidades penales de (Mauricio) Macri y (Horacio Rodríguez) Larreta por defraudación al Estado y por poner en riesgo la salud de los trabajadores y los usuarios”.
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Es que el propio Montmollín reconoció la existencia de las pruebas que fueron pasadas por alto por los técnicos del SBASE y que, desde el organismo confiaron en que las autoridades del Metro de Madrid venderían material en condiciones de circular atento a la normativa vigente a escala internacional. Para Solano “incumplieron sus deberes como funcionarios públicos al no exigir las certificaciones de que los vagones estaban libres de asbesto. El resultado es que ya se confirmaron 11 trabajadores que presentan contaminación en sus pulmones y pueden derivar en cáncer”.
El 10 de octubre la legislatura porteña aprobó un proyecto presentado por el mismo legislador reclamando un pedido de informes al ejecutivo porteño que deberá llegar al recinto para su consideración antes de los 30 días de aprobada la norma. Ahora, con seguridad, el debate pondrá en tela de juicio la continuidad del titular del organismo estatal que regula el funcionamiento y el cumplimiento de la normativa contemplada en las concesiones que, además, fueron renovadas sin licitación y por el plazo de un año en dos oportunidades.
El pedido de informes presentado por Solano “solicita consignar el alcance de la contaminación con asbesto en las formaciones de todas las líneas del Subte, aclarando los planes de descontaminación para preservar la salud de los trabajadores, los usuarios y garantizar el servicio».
En ese sentido se solicita al ejecutivo porteño que aclare «si ha realizado una investigación sobre la responsabilidad de los funcionarios involucrados en la compra del material rodante contaminado con asbesto».
Con anterioridad, la bancada del FIT en la Ciudad había presentado otro proyecto sobre tablas exigiendo la comparecencia en el recinto de las autoridades involucradas aunque la iniciativa fuera rechazada por 37 votos de los diputados del oficialismo y aliados que, sin embargo, ahora desistieron de tomar la misma actitud ante el pedido de informes.
