La devaluación del peso, la inflación, el estancamiento del empleo y el aumento en las tarifas elevarán los índices de pobreza. Así lo analizó el director del Observatorio de la deuda social de la UCA, Agustín Salvia.

“La tendencia a la mejora que se había observado en el segundo semestre de 2017 se vio paralizada con ya un rebote inflacionario en el tercer trimestre, tras la devaluación de diciembre, y un proceso de estancamiento en el sector informal de la economía. Esto se vio agravado con una nueva devaluación del mes pasado, también con efecto en la inflación, y el aumento de tarifas. Todas las evidencias demuestran que va aumentar la pobreza en forma no explosiva pero sí importante. Las mejores obtenidas en 2017 con respecto a 2016 estarían teniendo algún nivel de marcha atrás”, señaló en diálogo con FM Milenium.

Salvia destacó que “en este momento no está habiendo crecimiento de empleo, fundamentalmente en hogares pobres. De hecho se están reduciendo las horas de trabajo de quienes hacen changas”. A eso se suma que “los salarios no están aumentando o lo hacen por debajo de la inflación”.

El director del Observatorio, que esta semana comenzó a medir la pobreza apara presentar su informe anual, se refirió además a la frase del presidente Mauricio Macri sobre el exceso de confianza en las medidas económicas.

“El costo que estamos sufriendo como sociedad en materia inflacionaria, porque es un impuesto la inflación, quienes más lo sufren son los sectores más pobres, más vulnerables. Se apostó con mucha confianza a un proceso, como en el primer año de gobierno, cuando se apostó a que venían las inversiones y no iba a hacer falta el endeudamiento externo. Inversiones productivas que no vinieron en la magnitud que se esperaba. Se suponía que estaba la luz al final del túnel y hubo que esperar un año y medio”, detalló. .

Sobre el rol de la oposición, consideró que “ha sido bastante civilizada en materia de mantener niveles de gobernabilidad y confianza que en otros contextos políticos, históricos, hubiese sido muy desgastante, de mucho deterioro para un gobierno después de que sus promesas no se cumplieran sistemáticamente”.

En el mismo sentido se refirió al sindicalismo. “El propio sindicalismo mantuvo relativa paz social en un contexto que claramente no ha sido afortunado en materia de promesas, expectativas creadas y realizaciones alcanzadas”, agregó.