“Queríamos ir a pasar un buen momento, pero todo terminó siendo un caos”.

El miércoles, Nicole reservó una mesa para ella y tres amigas en el restobar Belushi, en Palermo, para esa noche a las 22. Le tomaron la reserva. La primera en llegar fue Florencia Romano, arbitra de fútbol. La reserva estaba ok. “Preguntó por una lista que estaba a mi nombre, pasó, se sentó y nos esperó”, cuenta a Nicole.

“Cuando llegamos con otra de las chicas y queremos ingresar nos ponen en suspenso, los patovicas se van adentro media hora, vuelven y nos dicen que no había ninguna lista a mi nombre”, continúa la mujer. Nicole y su amiga son trans. Sigue: “Además, el patovica nos empezó a tratar en masculino: ‘Chicos no están anotados’, nos decía”.

Se quejaron. “Un patovica me pateó, me empujó contra las mesas, me corté las manos. En medio de ese acto de violencia, llegó la policía y se llevó detenida a Florencia sin ningún justificativo. Ya era medianoche. Nos acusaron de robar y romper cosas cuando ellos me tiraron en un acto de salvajismo. Fue un desastre”. Nicole suena triste pero firme.

“Flor estuvo 16 horas incomunicada sin un vaso de agua. Todo por nada. ¿Se justifica todo esto? Ponen gente ignorante las puertas de lugares que son para pasar un buen momento y actuaron como si estuviéramos en la dictadura militar. Esto es algo terrible para esta época. ¿Donde está la ley de género? Es aberrante”, denuncia Nicole.

En su cuenta de Twitter, el bar publicó: “Belushi cumple en informar y comunicar que en ningún momento, ni en los nueve años que llevamos en el negocio gastronómico, hemos discriminado por ningún motivo sectario. Belushi es un restaurante bar nocturno donde se realizan eventos de índole privado. Esta persona ingresó por la fuerza, burlando la seguridad del lugar, destrozando todo lo que tuvo a su alcance, obligando a dar intervención a la fuerza pública, en este caso, la policía. Lamentamos la triste situación y sin más saludamos atentamente”. El posteo empezó a cosechar el repudio en la red social. Nicole sostiene que no fue así.

Tras 16 horas de detención, Florencia fue liberada. “Ya logramos su liberación”, dijo también por Twitter María Rachid, directora del Instituto contra la Discriminación en la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires y secretaria general de la FALGBT. Además, Rachid aseguró que desde la institución “vamos a intervenir en las denuncias por discriminación”.

Nicole, mientras tanto, pide algo esencial: “Queremos la dignidad que se merece cualquier ser humano. Estamos en tiempos de democracia, de nunca más y de ni una menos. Necesitamos una Argentina más honesta y más digna”.