En algunas de las grandes capitales teatrales del mundo, como Londres, París y Nueva York, muchas obras pasan primero por el circuito off para medir la respuesta del público y después –si la repercusión es positiva– desembarcar en las salas más convocantes. Con esa estrategia en mente, el director Manuel González Gil le acercó al productor Javier Faroni la propuesta de hacer una versión teatral de La naranja mecánica en El Método Kairos. González Gil, a cargo de la dramaturgia y de la puesta en escena, eligió esa historia después de caminar por la avenida Corrientes y notar que casi todos los teatros apuestan a la comedia por sobe los otros géneros.

«Obviamente estamos pasando un momento muy especial en donde lo urgente desplaza a lo trascendente. Y el teatro no puede aislarse de esta realidad. Si se repasan los diez o 15 títulos de mayor convocatoria de las salas más importantes, veremos que no hay ningún drama o tragedia entre ellos. Los productores le escapan a tomar riesgos. Parecería que en épocas de crisis el público solamente desea evadirse a través del humor o de propuestas con cierta liviandad en el armado y contenido de sus dramaturgias», reflexiona González Gil.

El desafío que propone el director es sumamente atractivo: llevar al teatro estructuras dramáticas que no fueron pensadas para desarrollarse entre cuatro paredes. La novela La naranja mecánica y la renombrada versión cinematográfica realizada por Stanley Kubrick en 1972 proponen mundos y estéticas específicas. González Gil, entonces, hizo un recorte afín a sus obsesiones: «En el caso de esta pieza, me interesó hablar de un espacio y un tiempo incierto porque es una manera de búsqueda de la universalidad que el tema nos propone. La estética nos debe desconcertar en cierta forma. ¿Es el futuro? ¿Es el pasado? ¿Es el presente? Burgess y Kubrick, obviamente, la plantearon en un tiempo futuro. Pero constantemente al leer y releer la novela me preguntaba si ese futuro no había llegado después de más de 50 años de su creación».

La historia es conocida, pero vale la pena repasarla. Un joven llamado Alex y su banda de amigos despliegan su violencia sobre múltiples desprevenidos. Luego de ser detenido, Alex es atormentado con una técnica novedosa que promete terminar con la maldad en los seres humanos. Los resultados y las consecuencias serán mucho más complejas y perversas que los cálculos iniciales.

El elenco incluye a Franco Masini, Enrique Dumont, Stella Maris Faggiano y Toto Kirzner (hijo de Araceli González y Adrian Suar), entre otros. González Gil los exigió para que su trabajo atravesara ese futuro que Burgess y Kubrick imaginaron. «A mis actores les pido verdad, entrega, disciplina e inteligencia dramática. Siempre trabajamos con cuestionamientos. Me gusta que el teatro y las obras hagan preguntas más que dar respuestas: ¿cuál sería hoy el método Ludovico con el que consiguieron casi un lavado de cerebro del protagonista?, ¿con qué métodos hoy se logra torcer la voluntad y la opinión?, ¿son los medios?, ¿ya se podría pensar en implantes multitudinarios de chips? Todas cuestiones que hace unos años parecían de un futuro muy lejano y hoy nos arrojan respuestas muy distintas». «

¿CUÁNDO?

La naranja mecánica. Dirección: Manuel González Gil. Elenco: Franco Masini, Enrique Dumont, Stella Maris Faggiano y Toto Kirzner. De viernes a domingo a las 21 (sábados también a las 23) en El Método Kairos, El Salvador 4530.