Una joven santiagueña de 22 años murió en el hospital Regional de la ciudad capital de Santiago del Estero, donde llegó en grave estado luego de realizarse un aborto. El diagnóstico final habla de una infección generalizada, que le provocó varios paros cardiorrespiratorios mientras los médicos le practicaban una operación de útero con urgencia. La joven superó la cirugía, pero murió pocas horas después.

Se llamaba Liliana Herrera y era madre de dos niños. Vivía en el Paraje Las Lomitas, una localidad rural que apenas supera los 10 mil habitantes, donde la pobreza es más pobreza que en tantos lados.

El viernes por la noche llegó como pudo hasta la capital provincial, a días de realizarse un aborto clandestino. No pudieron salvarle la vida y por ahora no se conocen detalles de lo ocurrido.

Lo que sí se conoce es la postura de los senadores santiagueños de cara a la votación del próximo miércoles. Blanca Porcel de Riccobelli y Ada Itúrrez de Cappellini, por el Frente Cívico, y Gerardo Montenegro, del Bloque Frente Popular, ya adelantaron que votarán en contra del aborto seguro, legal y gratuito. Ya en diputados, seis de los siete representantes de Santiago del Estero votaron en contra.

Mientras tanto, en la provincia ya son tres las muertes comprobadas a causas de abortos clandestinos en lo que va del año. Se presume, claro, que esa cifra hasta podría triplicarse teniendo en cuenta que la mayoría de las mujeres que mueren por la misma causa no llegan ni siquiera a hospitalizarse.

Santiago del Estero es la cuarta provincia del país con más alta tasa de embarazo adolescente.