La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) desarrolla una serie de acciones en conjunto con los gremios docentes nucleados en la Central de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) para exigirle al Ministro la marcha atrás en los despidos de los 400 empleados de equipos centrales y 2600 del programa Nuestra Escuela. La primera acción fue montar una playa para esperar el Ministro Esteban Bullrich, quien este lunes regresó de sus vacaciones.

Si bien desde distintos medios informan sobre una supuesta reunión convocada por Bullrich a la que concurrirían los gremios docentes, los sindicalistas negaron la convocatoria y aseguraron que por ahora no hubo comunicación por parte de las autoridades.

En ese marco, los delegados de ATE anuncian una clase abierta para este miércoles y un festival para jueves. Más allá de esto,  los trabajadores advierten que en caso de no haber una respuesta concreta al reclamo por la reincorporación de los 4000 trabajadores se dispondrán medidas de fuerza más duras.

Horas antes de que se montara la playa frente al Palacio Pizzurno, Sonia Alesso, secretaria general de CTERA, señaló en conferencia de prensa que “en estas condiciones corre peligro el inicio de clases”.

La intención de los dirigentes sindicales es que en caso de no lograr la reincorporación de los despedidos, el conflicto sea discutido en el marco de las paritarias de cara al inicio de clases.