Los rugbiers detenidos por el asesinato de Fernando Báez Sosa fueron trasladados este jueves a la fiscalía de Villa Gesell para ser sometidos a una rueda de reconocimiento. Es un día clave en la investigación, porque de esa forma se buscará esclarecer el rol que tuvo cada uno de los diez imputados en el crimen del joven de 18 años.

La medida fue solicitada por la fiscal de Villa Gesell a cargo del caso, Verónica Zamboni, y se desarrollaba desde las 8.30 en la sede de la Secretaría de Seguridad de la municipalidad local, donde además funcionan oficinas de distintas divisiones de la policía provincial, sobre Paseo 139 y la ruta provincial 11.

Por primera vez desde la agresión al joven, los detenidos estarán frente a frente con los amigos de la víctima. Este jueves se llevará adelante la primera de cuatro jornadas en presencia de testigos y familiares de Fernando.

El procedimiento está previsto comience en horas del mediodía en el Centro de Convenciones Néstor Kirchner, ubicado en Paseo 139 y la Ruta Nacional 11, en la ciudad balnearia. De acuerdo por lo dispuesto el juez de Garantías de Dolores David Mancinelli, habrá otras tres jornadas de ruedas de reconocimiento: este viernes, lunes y el martes 28.

La defensa de los acusados cuestionó la pericia porque los rostros de los imputados ya son conocidos públicamente, debido a que sus fotos fueron publicadas en distintos medios de comunicación y en redes sociales.

Sin embargo, el fiscal general Diego Escoda le restó importancia a los cuestionamientos y señaló que a partir de los reconocimientos quizá alguno de los imputados como partícipes podría sumarse a los acusados como autores.

Los acusados son Máximo Thomsen (20), Ciro Pertossi (19), Matías Benicelli (20), Ayrton Viollaz (20), Luciano Pertossi (18), Lucas Pertossi (20), Alejo Milanesi (20), Enzo Comelli (19), Juan Pedro Guarino (19) y Blas Cinalli (18), quienes fueron trasladados cerca de las 7.30 en dos combis de policía.

Hasta el momento, los imputados se encuentran alojados en dos comisarías distintas, la seccional 2a. de Villa Gesell y la 1a. de Pinamar, aunque se presume que en las próximas horas serán llevados al Penal de Dolores.

Los diez jóvenes, que permanecen detenidos desde el sábado, están imputados del delito de “homicidio agravado por concurso premeditado por dos o más personas”, que prevé una pena de prisión perpetua.

Dos de ellos, Máximo Thomsen y Ciro Pertossi, fueron acusados por la fiscal del caso, Verónica Zamboni, como “coautores”; mientras que el resto está imputado como “partícipe necesario”, por haber impedido que los amigos del joven pudieran intervenir.

La fiscalía quiere determinar si los amigos de Fernando que se encontraban con él al momento del ataque a golpes pueden identificar a los agresores.

Además, participarán testigos del hecho, ya que el joven fue atacado a golpes frente al boliche Le Brique en un momento en que había decenas de jóvenes transitando por el lugar.
El crimen de Fernando ocurrió el sábado, alrededor de las 4.50, a la salida del boliche Le Brique, en la avenida 3 y Paseo 102, en pleno centro de Villa Gesell, donde el joven estudiante de Derecho fue atacado a golpes de puño y patadas que le provocaron la muerte.

Este jueves en horas de la tarde, amigos y familiares de Fernando convocaron a otra “sentada pacífica con velas” en la puerta de la casa donde vivía el joven de 18 años, en Avenida Pueyrredón al 1800, en el barrio porteño de Recoleta. Julieta Rossi, novia de la víctima, pegó afiches con la imagen del chico con el pedido de justicia “por Fernando, asesinado en Gesell”. Las fotos se multiplicaron por fachadas de edificios, locales de ropa y de comida, de la zona.