La vuelta a clases resultó complicada en siete provincias del país, por medidas de fuerza de los docentes. Buenos Aires, Chaco, Tierra del Fuego, Santa Cruz, Misiones, Catamarca y Jujuy son los distritos donde se llevan a cabo paros, en algunos casos por 48 horas. Así lo dispuso la Federación Docente de la CTA Autónoma, “como consecuencia de la política de ajuste, tanto por el gobierno nacional del PRO, como por los diferentes gobiernos provinciales», según manifestaron.

En general los pedidos coinciden, al igual que los diagnósticos. Un resumen lo brindó el gremio ATECH en Chaco, que por 48 horas no darán clases: resaltaron “la pérdida estrepitosa del poder adquisitivo de los sueldos, con la inflación incesante, los tarifazos, las estampidas de precios».

En territorio bonaerense, el paro mayor fue convocado por la Unión de Docentes de Buenos Aires (Udocba), nueve secciones disidentes del SUTEBA, y unos 24.000 porteros y auxiliares docentes nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) con movilizaciones previstas para exigir, sobre todo, la reapertura de paritarias, algo que sucedió la semana pasada con otras cinco provincias que volvían a clases tras el receso invernal. Algunas de ellas, como Catamarca, seguirán con medidas de fuerza esta semana.

El Frente Gremial Docente de Buenos Aires se movilizará esta mañana a la Casa de la Provincia ubicada en Capital Federal y advirtió que esperan respuestas concretas en la reunión que mantendrán con la gobernación a cargo de María Eugenial Vidal el 9 de agosto. De lo contrario irán a un paro general docente.

Ante estos reclamos, el Gobierno respondió que no tienen pensado reabrir las paritarias. “Caemos de nuevo en tener de rehenes a los chicos”, consideró el  ministro de Trabajo bonaerense, Marcelo Villegas, mientras que el Director General de Cultura y Educación, Alejandro Finocchiaro, anticipó que «se descontarán los días de huelga».