Cuando habla de un nuevo mundo sabe por qué lo dice. Fueron más de cinco años al frente de Belgrano de Córdoba, equipo con el que logró el ascenso ni más ni menos que bajando en la Promoción a River. Ahora, esta nueva etapa lo encontrará ante el gran desafío de su carrera: dirigir a un grande del fútbol de Primera. Pero también se verá en la obligación de sacarse el mote de defensivo de encima.

“Cansado de repetir una y mil veces que me gusta jugar bien y tener equipo competitivo. Pero somos inteligentes. A veces no tuvimos los jugadores con características definitivas y jugamos de otra manera. Tenemos que interpretar que Racing es uno de los equipos más grande de Argentina y tiene que tener identidad”, afirmó el hombre que llegó a Avellaneda para reemplazar a Facundo Sava, quien fue despedido a días del arranque del torneo.

“Soy bastante simple y voy a seguir con la misma línea que venía, dándole alguna modificación, darle la impronta. Tratamos de adaptarnos a los jugadores que tenemos y que jueguen en una posición en la que se sientan cómodos, para rendir mejor en lo individual y lo colectivo. Todo el mundo empieza de cero y jugará el que haga méritos dentro del conjunto. No ser ni buenos ni malos, justos. Que juegue el que mejor está”, reconoció Zielinski, quien fue presentado por Víctor Blanco, el presidente académico.

Arranca una nueva etapa en la Academia. Luego del empate 1 a 1 con Talleres en el debut en el torneo, con Claudio Ubeda (volvió a ser DT de la reserva) en el banco, el Ruso aprovechará el parate por Eliminatorias para ir definiendo su equipo ideal en el desafío máximo de su carrera.