El presidente, Alberto Fernández, encabezó hoy la apertura de sesiones ordinarias del Congreso Nacional. Poco después de las 12, el jefe de Estado arribó al recinto y comenzó su discurso. Aunque no anunció el envío al Parlamento del nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que renegoció la deuda de 44 mil millones de dólares tomada por la gestión de Mauricio Macri, los pasajes del discurso dedicados a la deuda fueron los momentos claves, y más tensos del discurso.

«Ni un puente, ni una carretera. Solo nos quedó una deuda impagable», dijo Alberto en uno de los momentos más álgidos de su interVención. En ese marco también defendió el nuevo acuerdo, que aún se sigue negociando, con el organismo internacional. Sostuvo que espera que sea enviado al Congreso «esta semana» y que «no contempla ajuste», como ocurrió en planes anteriores. «Quiero dejarlo claro, no habrá reforma laboral ni previsional».

En otro pasaje sobre el mismo tema, el mandatario recordó: «El año pasado, a través del Decreto 8/2021 instruí a la Procuración del Tesoro para que iniciara una querella criminal tendiente a establecer la verdad y las responsabilidades sobre este endeudamiento. Este acuerdo tampoco releva al Poder Judicial de avanzar en esa investigación. Los argentinos y las argentinas tienen el derecho de saber como ocurrieron los hechos y quienes fueron los responsables de tanto desatino».

Tras esta frase del presidente, una parte de la bancada opositora se retiró del recinto. En su mayoría se levantaron de sus bancas diputados y senadores del PRO. La mayoría de los de la UCR se quedaron escuchando el discurso hasta el final.

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