El presidente Alberto Fernández; el jefe de Gabinete, Juan Manzur; y varios ministros participaron este miércoles de un encuentro que congregó a intendentes, dirigentes y candidatos del Frente de Todos (FdT) de Córdoba, ocasión en la que se repasaron las políticas aplicadas en esa provincia, los lineamientos a seguir de cara a las elecciones del 14 de noviembre y se determinaron las prioridades para la nueva etapa.

La reunión, que fue definida como «de trabajo» por los funcionarios, se realizó en el Centro Cultural Kirchner (CCK) y el Jefe de Estado llegó de manera sorpresiva al lugar tras arribar pocas horas antes a Buenos Aires de su gira por Italia y el Reino Unido, por lo cual en principio se esperaba que fuera una convocatoria que encabezaran Manzur y el titular de Interior, Eduardo de Pedro.

«Buscamos un país que incluya, que genere oportunidades, que mire hacia adelante, que es lo que históricamente hizo el peronismo», dijo Manzur al dirigirse a los presentes, ante quienes afirmó que «nosotros no estamos en contra de nadie, sino que trabajamos todos los días para que a la Argentina le vaya bien en el marco de este país profundamente federal».

Manzur se comprometió al armado de «una agenda de trabajo para seguir construyendo en equipo, porque todos los que están aquí forman parte del equipo de gobierno», tras lo cual anticipó que el viernes próximo viajará a la provincia de Córdoba para recorrer distintas localidades.

«Antes no nos podíamos juntar por la pandemia, pero ahora sí podemos, y tenemos dos años por delante para trabajar, para implementar acciones, para llevar adelante políticas públicas. Vamos a recuperar todo el tiempo perdido», afirmó Manzur.

Por su parte, el secretario de Obras Públicas de la Nación, Martín Gill, candidato a diputado nacional por Córdoba por el FdT, aseguró que «podemos mirar a los ojos a cada cordobés, sin ponernos colorados, y decir que nunca un Gobierno nacional hizo por la provincia lo que hicieron Alberto y Cristina Fernández en esta gestión».

Detalló que «hoy hay más de 460 obras en cada rincón de los 427 municipios y comunas que tiene la provincia, es la muestra más contundente de un federalismo que nunca antes existió», producto de «una decisión política y de un gabinete que está presente y que ha materializado este cambio de paradigma con Córdoba».

El senador nacional por la provincia mediterránea Carlos Caserio afirmó que «se están desarrollando todas esas obras sin darle una mirada política», y que eso es importante «porque que Córdoba es la segunda provincia del país, tanto en cantidad de habitantes como en productividad».

«Pero sobre todo porque es una provincia de la cual la Argentina no puede prescindir, pero también está demostrado que Córdoba no puede prescindir de la Argentina», enfatizó el legislador.

La relación de la Casa Rosada con esa provincia quedó en el centro de la escena luego de que el gobernador, el peronista Juan Schiaretti, planteara recientemente que en Córdoba «el kirchnerismo es rechazado por una enorme mayoría», y pidió una gestión «para un país más federal».

Esas declaraciones no pasaron de largo y Juan Zabaleta, ministro de Desarrollo Social, le respondió en el marco del encuentro.

«Hay que salir de estos títulos rimbombantes en esta etapa electoral, porque la sociedad argentina la está pasando muy mal y nosotros lo sabemos; por eso nosotros ponemos siempre énfasis desde el punto de vista social y de la recuperación del empleo, así que no importa lo que digan en época electoral y a una semana de los comicios», sostuvo ante los periodistas luego de la reunión.

También el secretario de Obras Públicas se refirió a las declaraciones del gobernador, y subrayó la actitud del Presidente, quien «no esperó a amigarse con los cordobeses para cumplir con la palabra empeñada. Lo hizo en la obra pública, en el aporte a la caja de jubilaciones que saldó una deuda histórica que dejó el macrismo, para que por primera vez tenga superávit en décadas», afirmó.

El senador Caserio se sumó a las respuestas a las declaraciones de Schiaretti, y tras manifestarse «sorprendido» de que el gobernador cordobés afirme que es «opositor», aseguró que «él tuvo una afinidad muy grande con Mauricio Macri y eso, de algún modo, se sostiene».

Advirtió que el gobernador «está empecinado en aislar a Córdoba y no estamos de acuerdo con eso. La provincia, si no tuviera el apoyo del Gobierno nacional, no estaría como está», agregó.

«Schiaretti dice que institucionalmente estamos bárbaro (con el Gobierno nacional) ¿Qué quiere decir? Que no tiene ninguna queja. Él tomó la decisión política de aislar a Córdoba, pero si además tiene otra cosa escondida, no lo conocemos», concluyó Caserio.

El ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, destacó a su vez que Córdoba «tiene el nivel de inversión más importante de los últimos 30 años», en materia de «acueductos, cloacas, rutas, de agua, de viviendas. En los 4 años de macrismo, a Córdoba le fue mal porque le fue mal a la pequeña y mediana empresa y a la industria de Córdoba», añadió.

Además de los mencionados, participaron los ministros Daniel Filmus (Ciencia, Tecnología e Innovación), Matías Lammens (Turismo y Deportes), Alexis Guerrera (Transporte), Elizabeth Gómez Alcorta (Mujeres, Géneros y Diversidad), Martín Soria (Justicia), Carla Vizzotti (Salud), Jorge Taiana (Defensa), Tristán Bauer (Cultura), Aníbal Fernández (Seguridad), Julián Domínguez (Agricultura), Jaime Perczyk (Educación) y Claudio Moroni (Trabajo).