La noticia de que el Gobierno de la Ciudad destinará 370 millones a “centros comerciales a cielo abierto”, generó la discusión sobre los usos de los fondos públicos que realiza el macrismo en la Capital Federal, especialmente bajo la gestión de Horacio Rodríguez Larreta, en un contexto donde aumenta la pobreza y las personas en situación de calle. Desde cintas transportadoras en veredas hasta consultorías para analizar el vínculo “vecino-mascota”, los casos aumentan, y vienen acompañados de llamativos cargos creados en la administración porteña.

Una de las más recordadas es la “subtrenmetrocleta”, que se propone conectar los diferentes transportes, especialmente los ferroviarios, en una Red de Expresos Regionales, a través de una Estación Central debajo del Obelisco. Sin embargo, una Encuesta de Movilidad Domiciliaria refleja que menos del 1% de los pasajeros necesita atravesar la Ciudad. Aún así el macrismo avanza en la megaobra que costará 14.187 millones de dólares. 

En Retiro se ubican dos de las medidas más extrañas del gobierno porteña. Una fue la estrella en la inauguración de la “puesta en valor” de la zona en octubre de 2013: las cintas transportadoras. Son cuatro cintas ubicadas frente al ferrocarril San Martín, que deberían moverse como escaleras mecánicas pero pegadas al suelo, en una vereda que es transitada por 380 mil personas al día. No sólo quitan espacio para andar a los peatones, sino que además no funcionan desde el mismo año de su inauguración. Hoy son usadas de morada por personas en situación de calle. La obra costó 25 millones de pesos.

Para adictos

A cientos de metros, en la intersección de avenida del Libertador y Ramos Mejía, yace el primer semáforo para “peatones tecnológicos” de la ciudad. Está destinado, según las propias autoridades, a aquellos adictos al celular que caminan distraídos mirando su smartphone. En lugar de iniciar una campaña de concientización decidieron emprender una seguidilla de instalaciones de estos semáforos que consisten en cuatro series de luces LED tipo tortuga que cambia de luz en sincronización con el semáforo tradicional. No es la primera localidad del país en encabezar este dispositivo. Rosario fue la primera. Pero en el caso de la localidad santafesina el semáforo consiste en una larga línea transversal al cruce peatonal, sobre la vereda, mucho más visible a un semáforo. En el caso porteño es una decena de cuadrados pequeños LED, más asemejados a un decorado lumínico navideño que a un semáforo. En teoría debería ser menos costoso que el rosarino. Pero mientras el santafecino demandó 30.000 pesos (en marzo de este año), el de Ciudad alcanzó los 500 mil pesos. El gobierno de Larreta se lo pagó a la empresa Mantelectric, que lleva ganados millones con el macrismo desde hace casi diez años, especialmente en lo que concierne al espacio público en las comunas del norte. En licitaciones para la concesión del mantenimiento de espacios verdes ha llegado a presentarse en una UTE junto a la empresa SES S.A., que tiene entre sus principales accionistas a Nicolás Caputo, el íntimo amigo del presidente Mauricio Macri. Según denunció en su momento La Política Online, la firma fue aportante de campaña del Pro en 2007 y 2009. En los últimos años amplió su rango de trabajos, como los trabajos de mantenimiento edilicio y de recursos físicos del Hospital Rivadavia, por 131,7 millones de pesos, y las “Tareas y Servicios de Mantenimiento de la Red Pluvial y Obras Complementarias», por más de 95 millones.

El negocio de lo verde y los animales

Volviendo a las obras, quien transite lugares emblemáticos de la ciudad verá postes con un cuadrado en la cabecera, a modo de portarretrato. Son “ventanas metálicas” que el gobierno de Larreta instala en el espacio público, frente a lugares representativos, a modo de “postal”, aunque con escasa información del lugar que se está observando. Va desde la ex Esma, el Cabildo y el Teatro Colon hasta la Casa Rosada. Arrancaron siendo 20, y el Ministerio de Ambiente lo extendió a 80, en el marco del programa Postales BA.   

Lo verde es otro gran negocio, a pesar de que la Ciudad cada vez registra menos m2 verde por habitante. En Caballito lanzaron la obra de “jardines verticales” en puentes del ferrocarril Sarmiento. Los ganó un vivero (Vivero Cúculo) por 8 millones de pesos. La misma firma acaba de obtener la licitación para la “Provisión e instalación de macetas para intervenciones en Ochavas», por 9,7 millones. Desde 2012, el Vivero lleva obtenidos en la Ciudad más de 35 millones de pesos en obras públicas.

Las mascotas son actores repetidos en el discurso del jefe de gobierno. De hecho, el Ejecutivo lleva adelante un taller “para aprender los mejores trucos a la hora de pasear a una mascota”. El 10 de junio, por ejemplo, dieron consejos e ideas “para mejorar las caminatas con animales por el espacio público” en Villa Crespo. Pero lo más llamativo en este rubro fue la consultoría que pagó el gobierno en abril pasado, luego de promover el ingreso de animales domésticos en los vagones del subte: $ 1.249.998 para un estudio que analice “el vínculo vecino-mascota-Ciudad”.

Gasto Público

Las medidas tienen correspondencia en llamativos cargos que creó el Ejecutivo en el último tiempo. En el Ministerio de Ambiente y Espacio Público que lidera Eduardo Macchiavelli se encuentra la subsecretaría de Vías Peatonales, a cargo de María Clara Muzzio (fue días después de conocerse la creación de la Dirección de Movilidad en Bicicleta de la Dirección Nacional de Transporte no Motorizado de la Subsecretaría de Movilidad Urbana de la Secretaría de Planificación del Transporte del Ministerio de Transporte de la Nación), con un sueldo de 140 mil pesos, que a su vez tiene las Direcciones Generales de Planificación de Intervenciones en Vías Peatonales, Obras en Vías Peatonales, Fiscalización de Vías Peatonales, y Coordinación Administrativa y Registros. La misma cartera posee direcciones generales de Ferias, de Ordenamiento del Espacio Público, de Regeneración Urbana, e incluso de Comunicación.

La Vicejefatura, encabezada por Diego Santilli, contiene direcciones generales de Desarrollo Familiar, de Convivencia en la Diversidad, de Colectividades, y una subsecretaría de Bienestar Ciudadano, liderada por Héctor Rodolfo Gallo, donde funcionan la dirección general de Desarrollo Saludable y la de Desarrollo Gastronómico, que encabeza movidas como el Campeonato Federal del Asado, que se desarrollará en el Obelisco el mes que viene, por 14,5 millones de pesos: 4,5 millones más que el del año pasado.