Casi cinco de cada 10 cordobeses se inclinaron hoy por los precandidatos a diputados nacionales de Cambiemos. El “batacazo” del macrismo mediterráneo fue una continuación de que alcanzó el PRO en 2015, distrito que impulsó la llegada de Mauricio Macri a la Presidencia.

Escrutadas el 73,60% de las mesas, el Ministerio de Interior, Obras Públicas y Vivienda informó que Cambiemos obtuvo 44,37% de los votos escrutados. Las dos listas que compitieron en las PASO obtuvieron en conjunto 643.190 votos. Así, el ex árbitro de fútbol Héctor Baldassi se convirtió en el primer candidato a diputado nacional, que buscará revalidar títulos en octubre.

Unión por Córdoba, el sello electoral del PJ delasotista, alcanzó –sin competencia interna- el 28,19% de los votos, un total 408.680 papeletas en su favor. En tanto, el kirchnerista Frente Córdoba Ciudadana se consolidaba en tercer lugar, con el 9,95% de los votos (158.634).

Los resultados de hoy consolidan la fortaleza política del macrismo en el segundo distrito más importante del país por número de electores. En 2015, cuando Mauricio Macri venció en el balotaje a Daniel Scioli con casi el 72% de los votos frente a casi 29% del bonaerense, en la categoría a diputados nacionales el resultado fue: 49,83% Cambiemos; 21,12% Unión por Córdoba; y 18,10% Frente para la Victoria.

Horas antes, y cuando aún no había resultados oficiales, el gobernador de Córdoba y mandamás de la campaña proselitista del PJ, Juan Schiaretti, admitió esta tarde el triunfo de Cambiemos en las PASO de la provincia. Sostuvo que “evidentemente la polarización planteada por el gobierno nacional entre el presidente Macri y el kirchnerismo le dio resultado” al oficialismo nacional.

Con la ausencia de su antecesor y mentor político, José Manuel de la Sota, Schiaretti procuró llevar optimismo a sus filas. Basado en los datos de sus propias bocas de urna, el mandatario señaló: «Conservamos las tres bancas que pusimos en juego y eso nos hace ser optimistas para la verdadera elección, la de octubre. La de ahora fue una encuesta».

Schiaretti, cuya estrategia electoral lo llevó de ser un activo aliado al macrismo en el Congreso Nacional a un repentino opositor, se pronunció en contra del actual sistema de las PASO. Propuso limitar las elecciones internas a los afiliados de los partidos y que sean las fuerzas políticas las que decidan si dirimen de modo eleccionario sus candidatos.

El ya consagrado candidato a diputado por Cambiemos, el ex árbitro Héctor Baldassi, todavía no se pronunció sobre el desarrollo electoral en el distrito mediterráneo. En tanto, el vicegobernador y primer candidato a diputado de Unión por Córdoba –así se llama el sello electoral del PJ delasotista-, Martín Llaryora, reforzó su perfil opositor al gobierno nacional. Expresó: «Lo importante es saber qué hará cada diputado por Córdoba. Ahora empieza la campaña por los puntos».

Esos dichos estuvieron en línea con los de Schiaretti, quien advirtió a La Rosada: “Seguiremos siempre defendiendo a nuestra provincia, quiero decirlo con todas las letras, vienen de provincia de Buenos Aires con el apoyo del gobierno nacional a llevarse 7.000 millones de pesos”.

En tanto, el candidato del kirchnerismo, Pablo Carro, señaló que la de su fuerza fue una “gran elección” y que el peronismo que se referencia en Cristina Kirchner, precandidata a senadora nacional por la provincia de Buenos Aires, “se consolidó como tercera fuerza” provincial.