La “inmediata libertad” de Carlos Zannini y Luis D’Elía fue firmada por el Tribunal Federal 8, detenidos en el marco de la causa que investiga la firma del Memorándum de Entendimiento entre Argentina e Irán en el marco de la causa AMIA. A las 9 de la mañana, el “Chino” Zanini salió del penal de Ezeiza, y una hora y media más tárde lo hizo el dirigente social Luis D’Elía.

Ambos dirigentes señalaron que su encarcelamiento se debe a que el gobierno junto con una parte del Poder Judicial apuntan contra la senadora Cristina Fernández de Kirchner. Luego de 108 días de estar detenido las juezas Gabriela Lopez Iñíguez y Sabrina Namer pasadas las 4 de la mañana determinaron esta medida que dice que ambos dirigentes pueden esperar el juicio en libertad, ya que no existe peligro de fuga ni de entorpecimiento de investigación en línea con el planteo de la fiscal Gabriela Baigún. El juez Nicolas Toselli, por su parte se excusó de intervenir porque es familiar de uno de los testigos de la causa.

También coincidieron en que hoy estarán en la Plaza de Mayo “para cumplir con los 30.000 desaparecidos”. “Esta es una causa que me inventaron y tiene como objetivo perjudicar a Cristina Fernández de Kirchner”, afirmó Zanini y analizó que con la decisión del tribunal a favor suyo y de D’Elía “se queda sin sustento” el pedido de desafuero de la ex presidenta. “Soy un inocente que estuvo preso. Me inventaron un delito que no he cometido”, declaró en la misma línea y se mostró preocupado por el hecho de que no lo hayan absuelto.

Por su parte, en los primeros minutos fuera de prisión el dirigente social Luis D’Elía declaró que “fue un honor ser preso político de esta basura” en referencia al presidente Mauricio Macri y muy emocionado aseguró: “salgo con mucha más fuerza y convicción”.

Además recordó lo significativo de la fecha en que es liberado: “A nosotros nos fue mejor que a nuestros antecesores, a nuestros compañeros los fusilaron en José León Suárez, los tiraron de aviones, los asesinaron. Hoy es el Día de la Memoria y tengo un orgullo tremendo de salir en libertad este día”, manifestó.

Sin dudar, D’Elía en la misma línea que Zanini remarcó que la persecución contra dirigentes políticos es un tiro por elevación contra Cristina Fernández: “Tenemos una gran jefa política que es Cristina Fernández de Kirchner. El mismo día que me metieron preso ella hizo una conferencia de prensa con mi esposa. Se lo voy a agradecer toda la vida. Estas son causas truchas armadas contra Cristina”.

En tren de agradecimientos el líder piquetero mencionó a varios dirigentes políticos como el “Chivo” Rossi, Juan Gravois, Wado de Pedro, Raúl Zaffaroni, Horacio Pietragalla, Jorge Ferraresi, Martín Sabatella, Mónica Macha, a los curas de Opción de los pobres, a los militantes y compañeros de su espacio y otros que fueron solidarios y siguió nombrando gente en la necesidad de no olvidarse a nadie.

Al igual que Zanini, D’Elía en la puerta del penal de Ezeiza varias veces se refirió a que el 60% de los presos no tienen condena y que “en estas cárceles están los hijos de los pobres y los trabajadores, no hay ningún pabellón que se llame Panama Paper, Bahama Lynch, ninguno donde estén los que blanquearon gracias a Macri”.

“Tenemos una gran jefa política que es Cristina Fernández Kirchner. El mismo día que me metieron preso ella hizo Estas son causas truchas armadas contra Cristina. Hoy no debe quedarse ningún argentino en la casa”, aseguró. Y celebró repetidamente los pasos que se dieron estas últimas semanas por la unidad del peronismo

En la resolución, el tribunal sostuvo: “Lo que debemos ponderar a la hora de evaluar el mantenimiento de esta medida cautelar (en referencia a la prisión preventiva) es si existe un riesgo real y concreto de que se vea frustrada la realización de dicho acto y la posibilidad de que la prueba pueda ser producida en ese marco, lo que, de la totalidad de las consideraciones que hemos efectuado no se colige de manera alguna”

De este modo, ambos dirigentes podrán esperar en libertad el juicio que en el cual el juez Claudio Bonadio los procesó basado en la denuncia del ex fiscal Alberto Nisman sobre presunto encubrimiento.