El juicio por los crímenes de lesa humanidad cometidos en centros clandestinos de la Armada en Bahía Blanca culminó este miércoles con un veredicto que referentes de derechos humanos calificaron de “vergonzoso”:  el Tribunal Oral en lo Criminal Federal bahiense absolvió a cinco marinos y excarceló a otros seis que recibieron penas bajas, de entre 3 y 9 años. Solo condenaron a perpetua a a Sergio Leonardo Aráoz Lamadrid, y a otros tres a 18 y 15 años. La fiscalía y las querellas habían pedido 13 perpetuas y penas de 16 a 25 años para otros cuatro.

El veredicto fue leído en la mañana de este miércoles por los jueces Luis Roberto Salas, Marcos Javier Aguerrido y Oscar Edmundo Albrieu, quienes absolvieron y liberaron a José Abdala Figueroa, ex capitán de fragata y ex jefe de la División Cuartel de la Base Naval de Infantería de Marina (BNIM); a Rómulo Augusto Illa, ex capitán de corbeta y ex jefe del BIC1; Aristóbulo Nicanor Moreira,ex teniente de navío y ex jefe de Operaciones, Personal y Logística del BIC1; Arturo María Quintana, ex teniente de navío y ex segundo comandante del BIC1; y Ricardo César Araujo, ex capitán de corbeta y ex comandante del Batallón de Comunicaciones 1 (BIC1).

Pero además ordenaron excarcelar al ex capitán de fragata,  Miguel Ángel Torrá, que condenado a 8 años; al ex capitán de corbeta Álvaro Hernán Hermelo, y el ex teniente de navío, Alejandro Carlos Lorenzini, ambos condenados a 5 años; y a Emilio José Schaller, ex segundo comandante y ex jefe de Operaciones e Inteligencia del Batallón Comando. Para todos los fiscales Miguel Ángel Palazzani, José Alberto Nebbia y Pablo Vicente Fermento habían pedido penas de prisión perpetua.

El TOF también condenó con penas bajas y liberó al ex suboficial Luis Oscar Conti, que recibió 6 años de cárcel pese que los fiscales habían pedido el doble y al ex capitán de Navío y Jefe en el BNIM, Enrique De León, que fue condenado a 9 años pese a que habían pedido 16 años de prisión.

“Son vergonzosas las condenas a los genocidas en el juicio Armada II, dignas del clima de época que vivimos”, disparó por sus redes sociales la nieta restituida y diputada de Unidad Ciudadana Victoria Montenegro, quien participó de la lectura del veredicto.

Desde la Agrupación H.I.J.O.S de Bahía Blanca también consideraron el fallo como “vergonzoso” y criticaron las “penas irrisorias” y las absoluciones a imputados por delitos de Lesa Humanidad. “El Partido Judicial funcional a la impunidad. Seguiremos luchando por cárcel a los genocidas con los 30 mil como bandera”, publicaron en su cuenta de la red social Twitter.

El juicio, conocido como “Armada II”, tuvo por imputados a 16 ex integrantes de la Armada y un ex agente de la Prefectura acusados por crímenes de lesa humanidad y genocidio, consistentes en privaciones ilegales de la libertad, tormentos, abuso sexual y homicidios en perjuicio de 66 víctimas. De todos los imputados, 15 no tenían condenas previas y la mayoría de ellos continuarán en esa condición.

El debate comenzó el 19 de octubre de 2018. Este miércoles, después de 10 meses de juicio,  los jueces Salas, Aguerrido y Albrieu solo condenaron a perpetua a Sergio Leonardo Aráoz Lamadrid, ex jefe del Centro de Instrucción y Adiestramiento contra la Subversión y jefe de la División Inteligencia Operativa del Comando de Operaciones Navales.

Los acusados que recibieron penas altas -aunque no los 25 años que habían solicitado las querellas y la fiscalía- fueron Mario José Bilesio y Heberto José Rubattino, ex jefes de la Compañía de Pitón, ambos condenados a 18 años. El ex prefecto y ex jefe de Informaciones de Prefectura Naval, Francisco Martínez Loydi, recibió una condena a 15 años de cárcel. Fue un buen negocio para él: habían pedido perpetua.

El debate oral por crímenes de lesa humanidad fue el sexto que se realizó en esa ciudad del sur bonaerense y es la segunda parte de la Causa Armada Argentina. Se juzgaron delitos cometidos en jurisdicción de la Armada en Bahía Blanca y principalmente Punta Alta, donde funcionaron los centros clandestinos  Baterías, Buque ARA 9 de Julio y el puesto 1 de Base Naval Puerto Belgrano.