El jefe de Gabinete, Marcos Peña, brinda un nuevo informe ante la Cámara de Diputados. Lo realiza en uno de los momentos más complicados del gobierno de Mauricio Macri ya que se espera que brinde explicaciones por “los conflictos de intereses” del Correo Argentino y Avianca. Mientras el funcionario hable ante los legisladores las calles porteñas serán el escenario de la Marcha Federal Docente, sin duda otro de los temas que deberá dar explicaciones.

En ese sentido, Peña asegura que no hubo conflicto de intereses porque “el Presidente de la Nación no intervino en el acuerdo” y señaló que para «determinar la existencia de un conflicto de interés, se requiere que los intereses personales, laborales, económicos o financieros de un funcionario se encuentren en conflicto con el cumplimiento de los deberes y funciones de su cargo, circunstancia esta que no ha tenido lugar”. 

El jefe de ministros presentó el estado del gobierno y comenzó a responder luego las casi novecientas preguntas que le remitieron los diputados. 

Aseguró que el país «se encuentra en un sendero de crecimiento» de la economía y del empleo.  »2016 fue un año difícil, pero gracias a las medidas que implementamos evitamos una crisis y ya estamos en un sendero de crecimiento», aseguró y agregó: »En el último trimestre de 2016 la economía creció un 0,9% en relación al trimestre anterior y la tendencia se consolidó en el primer trimestre de 2017″.

Se refirió además a los dichos del titular de la Aduana, José Gomez Centurión, sobre la dictadura militar, Peña manifestó que para el gobierno «no hay dudas» que existió un plan sistemático de exterminio. «El 24 de marzo de 1976 marcó el inicio de la peor dictadura que soportó nuestro país y, tal como quedó demostrado por la acción de la CONADEP, los juicios a las juntas y los juicios posteriores que aún se siguen desplegando, el Terrorismo de Estado instalado desde las cúpulas militares se sostuvo en un plan sistemático de desaparición de personas, robos de bebés, asesinatos, expoliaciones y detenciones arbitrarias».

Peña sabe que debe dar respuestas exactas y no generar flancos para el regocijo de la oposición. Es por ello que en esta oportunidad incrementó la presencia de empleados de los Ministerios que muñidos de computadoras para brindarle una rápida respuesta a cada pregunta. Para ello se levantó lo que podría llamarse como el call center de Peña en el Salón de Pasos Perdidos. Estos empleados generan de manera veloz las respuestas a las preguntas que realicen los diputados que, una vez impresas, Peña utiliza en el recinto.