Este domingo el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, uno de los tres mandatarios provinciales que tiene el radicalismo en todo el país, se medirá en la pelea por su reelección con el exintendente capitalino Fabián Ríos, que encabeza la lista del Frente de Todos, secundado por el senador provincial Martín Barrionuevo. Serán las primeras elecciones locales de carácter ejecutivo de este año con casi 868 mil votantes habilitados. Desde el jueves por la noche, los comicios están empañados por el ataque a balazos que sufrió el diputado provincial del FdT, Miguel Arias, durante el cierre de campaña de su fuerza en la localidad de Tapebicuá.

El clima enrarecido de estas elecciones correntinas no se diluyó. Hay preocupación por el estado de salud del legislador herido. Según el último parte médico se mantiene estable, pero su estado es reservado. Esta noche, cuando se concrete el escrutinio, se cumplirán tres días del hecho, pero no hay indicios sobre quién fue el autor del ataque, aunque el pueblo donde ocurrió no supera los mil habitantes.

El caso conmocionó a toda la política nacional a dos semanas de las Primarias, pero a pesar de la gravedad del caso, no hubo expresiones públicas de Juntos por el Cambio para condenar el atentado. Tampoco de la UCR, que movilizó a toda su dirigencia para participar del cierre previsto para este domingo a la noche. Un alto dirigente nacional del partido explicó a Tiempo desde Corrientes que por la información aportada por Valdés, «la línea de investigación no apunta a un ataque dirigido a Arias sino al intendente de Paso de los Libres, Martín Ascúa (del FdT), con un móvil no político sino más bien personal».

Por el contrario, la ministra de Seguridad Sabina Frederic viajó a la provincia para reunirse con las autoridades. Dijo que «no hay hipótesis firmes», pero cuestionó a Juntos por el Cambio por su silencio. «Nuestra oposición deja bastante que desear. Es un hecho para repudiar, no hay dudas sobre lo ocurrido. Después del contrabando de armas a Bolivia no podemos esperar nada de Juntos por el Cambio».

La de este domingo será la segunda elección provincial que se anotará el radicalismo en lo que va del año, luego de las legislativas jujeñas del 27 de junio, donde el Frente Cambia Jujuy se quedó con 18 de las 24 bancas que renovaba la Legislatura provincial. La victoria cercana al 42% de los votos empoderó al gobernador Gerardo Morales, que construye su precandidatura presidencial y quiere disputar la titularidad del partido a fin de año. Morales estará presente en el cierre correntino junto con el titular de la UCR, Alfredo Cornejo, el senador Martín Lousteau, los precandidatos Adolfo Rubinstein y Facundo Manes, además del extitular del partido, Ernesto Sanz, entre otros. Todos buscarán exhibir la victoria provincial como otro poroto en la disputa de liderazgo que mantienen con el PRO al interior de JxC. Por esa razón era posible que los dirigentes del macrismo hagan lo propio. Sin embargo, desde el entorno del alcalde porteño, Horacio Rodríguez Larreta, descartaron la posibilidad de un viaje.

La Casa Rosada enviará al ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta. Llegará en su rol de interventor del PJ provincial para acompañar a los candidatos del FdT, luego de una compleja negociación para cerrar una lista de unidad.

Dentro de dos semanas los correntinos volverán a las urnas para elegir precandidatos a diputados nacionales, pero según las proyecciones, este domingo Valdés definirá la tendencia para lo que resta del calendario electoral. Lleva como candidato a vice al senador nacional Pedro Braillard Poccard y tiene amplias chances de obtener un segundo mandato para revalidar el predominio del radicalismo en la provincia que controla desde que fue intervenida en 1999 por una ley del Congreso, sancionada a partir de un proyecto enviado por el entonces presidente Fernando De la Rúa. El control federal duró dos años. Primero fue ejecutado por Ramón Mestre y luego por Oscar Aguad, hasta que el radical Ricardo Colombi se impuso en los comicios de 2001. Esa gestión de Aguad fue investigada por una causa de corrupción que prescribió.

Cerca de Valdés confiaron a este diario que aguardan una «gran ventaja» porque hay distritos que no elegirán intendente y lo harán en noviembre. La provincia tiene 74 municipios, pero este domingo hay 56 que elegirán intendentes y concejales. La diferencia, según la interpretación oficial, implicó que el FdT no haya movilizado toda su estructura en esos 18 municipios y aumenta las chances del Encuentro por Corrientes (ECo), la marca local de JxC.

Entre los 56 distritos que elegirán intendente hay uno que encierra un alto valor simbólico y político. La capital provincial ocupará el centro de la disputa a partir de la decisión del actual vicegobernador, Gustavo Canteros, de concretar su anunciada ruptura con Valdés y postularse a intendente capitalino en la boleta del Frente de Todos, que lidera el exalcalde Ríos, que condujo la municipalidad entre 2014 y 2017 y la perdió por poco frente al radical Eduardo Tassano que ahora pelea por un segundo mandato.

Además de los cargos ejecutivos y comunales también se renovarán cinco bancas del Senado y 15 la Cámara de Diputados local. Corrientes es la primera de las dos provincias que este año elige gobernador. La segunda es Santiago del Estero, que tiene un calendario distinto desde que fue intervenida en 2004 por otra ley del Congreso a partir de un texto enviado por el presidente Néstor Kirchner. Es gobernada por Gerardo Zamora del Frente Cívico, aliado del FdT. Este año buscará otra reelección en los comicios del 14 de noviembre.  «