El juez de instrucción penal Roberto Ponce, cuyas imágenes en un control callejero de alcoholemia recorrieron profusamente noticieros de TV, nunca procesó al policía Luis Chocobar. Su intervención en el expediente fue marginal y sin que produjera ningún acto procesal, ni a favor ni en contra del policía.

Pese a que su situación al ser detenido fue acompañada de expresiones del tipo “el juez que procesó a Chocobar manejaba borracho”, lo cierto es que el expediente pasó fugazmente por su juzgado y contrariamente a lo que se informa, el policía salió de allí libre. Y su libertad ni siquiera la firmó Ponce.


Tras el episodio en el que Chocobar causó la muerte de Pablo Kukoc, quien acababa de asaltar y malherir a un turista estadounidense el 8 de diciembre del año pasado, el policía quedó detenido y prestó declaración indagatoria ante el juzgado de instrucción número 17. Ese juzgado está vacante; lo ocupaba el juez Javier Feliciano Ríos, quien ganó por concurso un ascenso como juez de un tribunal oral federal y hoy tiene su despacho en Comodoro Py 2002. Ríos fue el juez que resolvió el caso Angeles Rawson, el homicidio de la adolescente por el que fue condenado a prisión perpetua el portero Jorge Mangeri.

Ponce suele subrogar el juzgado 17 y, de hecho, fue el primer juez de la causa Angeles Rawson durante una semana, por una corta licencia de Ríos. Ponce es titular del juzgado 23, que está situado a unos 20 metros del 17. Va caminando de su despacho al de su colega, que ahora está vacante.

Ponce tuvo la causa Chocobar por escasísimo tiempo. El hecho coincidió con una licencia que tenía pautada desde antes. El primer juez que efectivamente intervino en el expediente fue su colega Gustavo Pierretti, quien tras la indagatoria del policía dispuso su excarcelación porque no había “riesgos procesales” para dejarlo preso. Ponce ni siquiera tomó la indagatoria, es decir no tuvo contacto personal con el policía.

Por el episodio original, el asalto al turista norteamericano, está sospechado de haber participado un menor de edad, cuya identidad permanecerá en reserva por cuestiones legales.

Cuando un menor es presunto autor de un delito debe intervenir indefectiblemente un juez de menores. Pierretti, que es juez de “mayores”, se declaró incompetente y la causa pasó al magistrado del fuero de “menores” Enrique Velázquez. Fue Velázquez quien dictó el procesamiento de Chocobar (ratificado por dos tribunales que revisaron su resolución) pero también del menor de edad, a quien además le trabó un embargo de un millón de pesos, por el delito de “homicidio criminis causae (el que se comete para ocultar otro delito, ndr) y robo agravado”.

Sostener que Ponce fue juez de la causa es como decir que una persona que pasó algunas horas en el aeropuerto de Berlín, en una escala rumbo a otro país, conoce Alemania.