En medio de la negociación en el Ministerio de Educación por la reincorporación de 3000 despedidos, el referente de ATE en Educación, Rodrigo Recalde, sufrió un sospechoso robo en su casa.

“Se trata del comportamiento mafioso de grupos que actúan bajo la orden o el amparo del gobierno”, denunciaron desde ATE Capital en un comunicado.

La casa de Recalde, delegado de ATE en Educación, fue asaltada el jueves por la tarde, mientras participaba de una demorada reunión con las autoridades del Ministerio por los 3 mil despidos en esa cartera, denunciaron desde el gremio.

“Una o más personas ingresaron a su vivienda en Bernal rompiendo la ventana que da a la vereda y revolviendo sus pertenencias personales. Su familia encontró la casa «patas para arriba», con todo revuelto, los cajones vaciados y objetos rotos. Sólo faltaron un televisor y su computadora personal, en la que guardaba información relativa a su trabajo y a su función como secretario general de la junta interna de ATE en el Ministerio de Educación”, indicaron.

Hace una semana atrás, los delegados de Educación habían sido amenazados de muerte con un mensaje y una foto pegados dentro de los pasillos de la cartera que encabeza Esteban Bullrich.

Ate denunció además el seguimiento de su secretario General, Daniel Catalano.

“Un auto blanco no identificado se estacionó frente a la casa del secretario general de ATE Capital, Daniel Catalano, y el único hombre a bordo del vehículo tomó fotografías de la fachada de su vivienda”, señalaron.

Hace un mes atrás, la casa del dirigente también fue asaltada, sólo faltaron pertenencias simbólicas de sus hijos y la computadora personal del dirigente. “A pesar de la denuncia penal, realizada ese mismo 24 de noviembre, y de haber hecho público el acontecimiento, no hubo ningún avance en la investigación ni existió contacto de parte de las autoridades del Gobierno”, agregaron en un comunicado.

“Asaltos a los dirigentes expuestos en la lucha por la reincorporación de miles de trabajadores despedidos, amenazas de muerte y personas realizando tareas de inteligencia en los sectores de trabajo y en los domicilios particulares de los representantes gremiales no pueden ser la coincidencia casual de una serie de sucesos delictivos”, denunciaron, y agregaron: “Se trata del comportamiento mafioso de grupos que actúan bajo la orden o el amparo de un gobierno que avanza sobre los derechos de los trabajadores y aspira a que no haya resistencia. Esperamos algún pronunciamiento de parte de los ministerios de Seguridad y Justicia, y celeridad en las investigaciones penales, y hacemos responsables a Patricia Bullrich, Germán Garavano y Esteban Bullrich de la integridad física de los dirigentes involucrados y de sus respectivas familias”.