Nicolás Dujovne fue al Senado, acompañado de su equipo económico, para defender el proyecto de ley de Presupuesto 2019 con malas noticias para la economía del país. “Este Presupuesto responde a una coyuntura económica difícil para Argentina, donde esperamos que la actividad económica siga contrayéndose hasta fin de año, y en 2019 esperamos una caída promedio del 0,5%”, precisó Dujovne. Se prevé que el oficialismo logre sumar a Miguel Ángel Pichetto y algunos legisladores de su bloque y así logre la aprobación.

En el primer capítulo del debate por la ley que ya cuenta con media sanción de Diputados, tras una votación con 138 votos a favor, 103 en contra y 8 abstenciones, Dujovne pidió acompañamiento del Congreso para dar “una señal muy importante para reducir la incertidumbre”.

El funcionario concurrió acompañado por el secretario de Hacienda, Rodrigo Pena; el secretario de Política Económica, Miguel Braun; y el ministro de Energía, Javier Iguacel.

Dujovne aprovechó el escenario para criticar al gobierno anterior al referirse a “las dificultades fiscales” a las que el gobierno “se tuvo que enfrentar”, entre otras cosas por “un déficit en las cuentas públicas superior al 5% del PBI, que se financiaba con emisión monetaria”, y “un gasto consolidado récord que no se traducía en una mejora de la calidad de vida de los argentinos”.

Tras la exposición de Dujovne y su equipo, el primero de los senadores en pedir la palabra fue José Mayans, del Bloque Justicialista, quien en una larga y encendida alocución le echó en cara a los funcionarios la falta de previsibilidad del proyecto al recordarles que el año pasado Dujvone dio una conferencia de prensa al día siguiente de la aprobación en el Senado y cambió todas las estimaciones económicas. El ministro se defendió al argumentar que las previsiones de inflación eran las mismas que tenían en el sector privado y volvió a emprender contra el gobierno anterior al criticar las estadísticas del INDEC.

Pichetto se mostró también crítico de los funcionarios oficialistas, en particular, de Federico Sturzenegger y Luis Caputo, a quien le dijo “personaje menor”. Si bien se despachó contra la política financiera del gobierno, les adelantó que le presupuesto “será votado”.

Es que Pichetto se puso en el centro de la escena al ser la bisagra negociadora entre los gobernadores peronistas, que este martes concurrirán a su despacho, y el gobierno, quien necesita los votos de su bloque opositor para llegar tranquilo a la votación del 15 de noviembre en el recinto.

Mientras las preguntas al ministro continuaban dentro del Salón Provincias Argentinas, Pichetto salió al pasillo a hablar con la prensa donde aseguró que este martes se reunirá con gobernadores peronistas para lograr consenso sobre la excepción del impuesto de bienes personales a las viviendas de menos de 18 millones de pesos. Hasta el momento confirmaron Juan Schiaretti de Córdoba, Lucía Corpacci de Catamarca, Sergio Casas de La Rioja, Gustavo Bordet de Entre Ríos y Rosana Bertone de Tierra del Fuego.