El lunes que pasó parecía inminente la presentación formal de un proyecto de ley elaborado por el diputado rionegrino Luis Di Giacomo, titular del interbloque Porvincias Unidas, para eliminar del calendario electoral las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Sin embargo, por falta de adhesiones, se decidió postergar la discusión hasta que se termine el tratamiento el Presupuesto 2023 que presentó el ministro de Economía, Sergio Massa, la semana pasada. 

La idea de quitar la PASO para las presidenciales del año que viene no logra alcanzar acuerdos ni en opositores ni en oficialistas. En el marco del debate por el Presupuesto para la administración pública nacional del próximo año, que propone como meta un déficit del 1,9% del PBI, puso nuevamente en la agenda la funcionalidad de esta herramienta creada en el 2009, tras la aprobación de la Ley 26.571. 

En diálogo con Diputados TV, Di Giacomo opinó: “En la Argentina nunca ocurrió una Primarias, Abierta, Simultánea y Obligatoria, ni siquiera los que promulgaron esa ley concurrieron la mayoría de las veces”. “Siempre fue una minoría. El problema es que esa minoría -que interviene cuando le conviene- la pagamos todos-agregó-. Para el año que viene vamos a pagar entre 22 mil y 30 mil millones de pesos en una interna. Si un partido la quiere la haga por carta orgánica y se las financie”. 

El rionegrino, que ya había presentado una iniciativa en 2020 junto con el ahora senador Pablo Yedlin (FdT), criticó la norma: “Fue producto de un momento, pero nunca cumplió la función que tenía. Es un fracaso”. 

El titular del interbloque Provincias Unidas asegura que tiene el apoyo de ese espacio político que nuclea a 5 legisladores de Río Negro, Neuquén y Misiones. Pero, en todos los bloques hay posturas divididas. En el que responde al gobernador cordobés Juán Schiaretti fue la senadora Alejandra Vigo quien fogoneó la derogación de las primarias cuando a través de las redes sociales expresó su rechazo al considerar que son «un gastadero de plata». 

Desde el oficialismo fueron varios los diputados que le bajaron el tono a una reforma electoral. Uno de ellos fue Leandro Santoro quien se expresó en contra de cambiar las reglas de juego a menos de un año de las elecciones primarias. También Carlos Heller anticipó que “es cierto que no han demostrado la eficacia electoral que pretendían”, pero cuestionó la idea de que la “plata en política es malgastada”. 

Fuentes de Juntos por el Cambio le dijeron a este medio que consideran «una locura que quieran cambiar las reglas de juego electoral a pocos meses de la elección y sin hacerlo por un mínimo consenso. Es jugar sucio, violar las normas básicas de convivencia y poner en riesgo el sistema democrático», puntualizaron, con un cierto dramatismo.  

Desde el Frente de Izquierda, por su parte, comentaron a Tiempo que los cuatro representantes están en contra de la derogación. “El sistema electoral tiene muchas falencias, como por ejemplo el piso proscriptivo del 1,5 por ciento para pasar a las elecciones generales o el sistema de financiamiento de las campañas políticas. Pero de ningún modo nosotros aceptamos que primero Juntos con la boleta única y ahora el oficialismo con las PASO manipulen el sistema electoral al solo efecto de beneficiar sus posiciones en las elecciones”, indicaron. 

“No persiguen ninguna democratización del sistema sino sus propios intereses particulares. Nada tienen que ver estas cuestiones con los verdaderos problemas que atraviesa la mayoría de la población que no llega a fin de mes”, agregaron.  

Por ahora, ni la vicepresidenta Cristina Fernández ni su hijo Máximo Kirchner se pronunciaron públicamente al respecto. Si lo hizo el presidente Alberto Fernández quien desestimó la posibilidad de eliminarlas. Sin embargo, Andrés el “Cuervo” Larroque, ministro de Desarrllo bonaerense, sostuvo que el sistema de primarias abiertas “no se utiliza en la medida en que se pensó” en 2011. 

“Todos los sectores tenemos que tener la madurez de opinar y analizar las cosas no por la conveniencia del momento sino por lo que es mejor para el sistema político en general”, afirmó Larroque, en referencia a las distintas posturas que existen dentro del Frente de Todos y en Juntos por el Cambio, que en 2018 impulsó un proyecto similar-de eliminación de las PASO-en la Cámara de Diputados y ahora se opone a la reforma porque dificultaría la definición de sus candidaturas hacia 2023.