Amado Boudou fue detenido esta mañana porque fue vicepresidente.

Así se desprende del documento mediante el cual el juez Ariel Lijo dispuso su arresto, pese a que “se advierte que los imputados han cumplido con las obligaciones formales del proceso”. Es decir, siempre “estuvo a derecho”. ¿Qué tomó como referencia Lijo para detener a Boudou? El fallo de la Cámara Federal que, pese a que también estaba “a derecho”, ordenó arrestar al ex ministro de Planificación Julio De Vido.

“En virtud de estos lineamientos señalados por el Superior, cabe destacar que Amado Boudou ejerció el cargo de Ministro de Economía y Finanzas Públicas de la Nación y posteriormente el de Vicepresidente de la Nación, lo que lo ubicó en las más altas esferas de influencia del poder estatal durante un extenso período. Esta influencia puede ser extendida a José María Núñez Carmona, a quien el Fiscal señaló como quien revestía el carácter de persona interpuesta de Boudou”, explicó Lijo la detención.

En cuanto al ex amigo y socio de Boudou, José María Núñez Carmona (foto), también detenido este viernes, el juez resaltó que “posee cuentas en el exterior a su nombre, que registran inyección de fondos de por lo menos una sociedad panameña a través de una cuenta en la República Oriental del Uruguay por intermedio de un corresponsal alemán y de los cuales se ha tomado conocimiento recientemente. Ello evidencia la imposibilidad real de controlar el flujo de activos por los cuales se los está investigando”.


Hace más de una década, la Cámara Federal de Casación Penal sostuvo que una persona sometida a proceso tiene el derecho a permanecer en libertad siempre y cuando no entorpezca la investigación ni ponga en riesgo la investigación.

En el caso de Boudou, para el juez Lijo “toda medida coercitiva menos gravosa resulta exigua para el efectivo control de los activos de los imputados que se presumen fuera del circuito formal e, incluso, resultan débiles a los fines de evitar el desapoderamiento de los montos de dinero en efectivo que pudieran poseer dentro del circuito formal”.

En consecuencia, de acuerdo a este nuevo criterio que impera en la justicia penal federal porteña que depende exclusivamente de la libre interpretación de los jueces, “a efectos de neutralizar los riesgos procesales aludidos, la detención de los nombrados resulta imprescindible”.

En Comodoro Py

El ex vicepresidente Amado Boudou pidió su inmediata excarcelación y recusó al juez federal Ariel Lijo, quien ordenó hoy su detención en el marco de una causa por supuestos hechos de corrupción.Al ser indagado por el magistrado, Boudou señaló que su detención fue «arbitraria».

Boudou permaneció durante una hora y media en el Juzgado Federal 4, donde cuestionó al juez que ordenó su detención y exigió su apartamiento de la causa, según informaron fuentes judiciales.

Luego de que leyeran la imputación en su contra, Boudou realizó una breve declaración en la que resaltó que que siempre estuvo «a derecho» y que dio todas las explicaciones que le fueron requeridas.

Durante su permanencia en el juzgado de Lijo, el ex vicepresidente y ex ministro de Economía estuvo acompañado por su abogado Eduardo Durañona, quien debió volver de urgencia de la costa atlántica.

Boudou «no puede entender como después de tantos años de investigación, de tantos años de dar explicaciones y presentar escrito ahora lo detienen de esta forma», sostuvo su abogado en diálogo en los tribunales federales de Comodoro Py.

«Me sorprende la detención en una causa de tantos años de proceso. Pidió autorizaciones para salir del país y la Cámara se los concedió porque no había posibilidad de obstaculizar la causa o de profugarse», sostuvo su abogado.

Según fuentes judiciales, el juez Lijo intentó explicarle a Boudou que, con la detención del ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido, la Cámara Federal porteña había esgrimido nuevos lineamientos para justificar las detenciones preventivas, pero Boudou le dijo que no hacía falta esa explicación.

En el caso De Vido, la Cámara sostuvo que a la hora de examinar los riesgo procesales «no corresponde limitar el análisis al arraigo o la manera en que los involucrados se comportan formalmente en el proceso penal», sino que hay que evaluar si tuvieron poder o tienen vínculos con personas que pudieran ser de ayuda para eludir un proceso judicial.

En el marco de su indagatoria, Boudou sostuvo que estaba sorprendido por el «cambio intempestivo» en el manejo de la causa y, según pudo reconstruir este medio, se lo atribuyó a las denuncias presentadas esta semana contra el juez Lijo en el Consejo de la Magistratura.