El plan de lucha que llevan adelante los docentes en la Argentina está regido por dos situaciones indisociables: una paritaria insuficiente que se ve aún más disminuida por una inflación desmedida. Así, el salario no alcanza a cubrir el costo de vida y la falta de respuestas del Estado desencadena en el paro.

Es que con una inflación que supera el 45% (según el IPC Congreso) el acuerdo paritario, firmado en febrero por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), actualmente es insuficiente. En promedio, el aumento osciló entre un 30% y 35% para el grueso de la masa salarial de todas las provincias, con picos de hasta un 40% para los salarios más bajos. Por eso piden la reapertura de las negociaciones, para recuperar algo del poder adquisitivo perdido.

Pero la negativa del gobierno nacional a volver a sentarse para discutir salarios tiene como consecuencia el paro. El miércoles pararán por 24 horas los docentes de escuelas públicas (convocados por CTERA y UDA) y el 2 de septiembre harán huelga los privados (nucleados en SADOP), en el marco de una Marcha Federal convocada para los días 31 de agosto, y 1 y 2 septiembre.

En diálogo con Tiempo, la secretaria general de CTERA, Sonia Alesso, hizo un repaso de la situación de los docentes a nivel nacional y denunció el estado de gravedad que atraviesan los trabajadores del gremio en relación a la subejecución presupuestaria en educación.

“La inflación supera ampliamente los salarios que pactaron las provincias en febrero, cuando nadie imaginaba que ahora se estaría en una inflación interanual del 45%”, explicó la gremialista. Y continuó: “Sabíamos que iba a ser imposible fijar un porcentaje anual a principio de año, porque estaba claro que nadie podía determinar a ciencia cierta el valor del aumento del salario. Por eso se planteó, y hasta se firmó en algunas provincias, mantener abierta la paritaria para ajustar el salario si la inflación superaba el acuerdo. Ya nos decían en aquel entonces que la inflación iba a bajar”.

A casi seis meses de firmado el acuerdo paritario nacional, la respuesta del gobierno de Mauricio Macri sigue siendo la misma para justificar la negativa a volver a negociar: “Nos siguen diciendo que la inflación va a bajar. Que creen que va a bajar. Es una apuesta de fe, pero no hay nada que indique que esto va a pasar. Lo que sí baja es el poder adquisitivo del salario”.

Según detalló Alesso, en promedio en todo el país, sólo un 5% o 6% de los docentes cobran la mínima y recibieron un aumento del 40%. “Aproximadamente el 85% de los docentes de la Argentina recibió entre un 30% y un 35% de aumento”, cuantificó la titular de CTERA.

Pero la discusión salarial no es la única problemática que atraviesa el gremio de los maestros. Según denunció Alesso existe, además, una grave situación en relación a la subejecución presupuestaria de la inversión educativa. Según datos oficiales, cinco ítems de suma importancia para el desarrollo educativo nacional reflejan inversiones muy por debajo de lo esperado:

-En materia de Gestión Educativa (que se refiere a la aplicación de tecnologías de la información, acompañamiento pedagógico y a programas como Conectar Igualdad) sólo se ejecutó el 35% en ocho meses;

-Para Acciones Compensatorias (asistencia y material pedagógico para escuelas vulnerables, becas para estudiantes de pueblos originarios, y fomento de escuelas albergues y ludotecas) sólo se ejecutó el 20,3% de lo presupuestado;

-En Acciones de Formación Docente sólo se ejecutó el 26,7%. “Esto significa el incumplimiento al Plan Nacional de Formación Docente homologado en noviembre de 2014 por el Ministerio de Trabajo de la Nación y que se empezó a ejecutar durante todo 2015. Este ítem es muy importante porque refiere a la formación de los docentes de todo el país, ya que destina fondos coparticipables que llegan a todas las provincias argentinas y que son parte del financiamiento educativo nacional”, apuntó Alesso;

-En materia de Infraestructura y Equipamiento Escolar (para la construcción de nuevos edificios, y para la ampliación, refacción e instalación en edificios escolares) sólo se ejecutó el 9,4% de lo asignado;

-Y en Innovación y Desarrollo de Educación Tecnológica, conforme la Ley 26.058 de Educación Técnico Profesional para el fortalecimiento de las escuelas técnicas en todas las provincias, sólo se ejecutó el 6,2%.

“Estos datos hablan de que se está poniendo en riesgo el cumplimiento de la Ley 26.206 de Educación Nacional y la Ley 26.075 de Financiamiento Educativo que fija metas pedagógicas y de financiamiento federal”, alarmó Alesso. Y concluyó: “Por todo esto vamos al paro el 24 de agosto, porque ante el aumento de la canasta alimentaria, el aumento del transporte, los tarifazos, la inflación, la subejecución presupuestaria y el incumplimiento de dos leyes del Congreso de la Nación, votadas con amplio consenso, se genera una situación de gravedad que genera más conflictos en todo el país”.