El Juzgado Federal N° 1 de La Plata con competencia electoral, a cargo de Alejo Ramos Padilla, y el ministerio de Gobierno bonaerense que conduce Teresa García comenzaron a planificar lo que será la logística de las primeras elecciones bajo pandemia en las que se elegirán 35 diputados nacionales, 69 legisladores provinciales, 1097 concejales y 401 consejeros escolares en los 135 municipios. Es un desafío muy complejo ya que hay más de 13 millones de electores habilitados para votar, en más de 37 mil mesas.

El intercambio para la elaboración de los protocolos que se aplicarán en los comicios comenzó apenas asumió Ramos Padilla al frente de ese jugado, a fines de febrero. El Ejecutivo bonaerense tiene en su haber la experiencia de tres elecciones de residentes extranjeros -Bolivia, Perú y Ecuador- en pandemia y también la interna de la Unión Cívica Radical, que se realizó el 21 de marzo. En todos los casos, la organización y los protocolos pasaron por el filtro del Ministerio de Gobierno y del de Salud.

«Desde comienzos de año venimos trabajando en la adecuación de toda la ingeniería en la provincia. Es una elección atípica, en medio de una pandemia», señaló a Tiempo la ministra de Gobierno, Teresa García. Y explicó que «en el caso de la interna radical, si bien es una elección chica, como tenía mucha extensión en el territorio en cuanto a los lugares para votar, nos permitió ver cómo funcionaban los protocolos».

La primera conclusión de esa «prueba piloto» es que se debe mantener la cantidad de electores por mesa. En la última elección, el número fue de 350. La segunda es que, para poder cumplir con el distanciamiento social y la ventilación cruzada que son la base de las medidas de prevención del coronavirus, es necesario ampliar el número de establecimientos donde se vota y que fue de 5500 en 2019. Para esto el gobierno revisa con la Dirección General de Cultura y Educación las condiciones de otros colegios y también piensa en sumar, por ejemplo, clubes u otros espacios que cumplan con los requisitos.

«Hoy es imposible pensar que, por ejemplo, en una escuela en la que había 12 ó 14 mesas, la gente pueda hacer cola en el patio esperando para votar con los protocolos que vamos a tener. Por eso tendremos que buscar un lugar para trasladar esa partición de mesas», acotó la ministra y adelantó que es difícil pensar en “más de ocho mesas” por escuela, aunque aún no está definido cuál será el tope. También dijo que pedirán colaboración a los municipios para cortar la calle para que la gente espere afuera de la escuela, en caso de ser necesario.

El otro punto crítico es evitar la aglomeración de votantes en los horarios pico: el arranque de la jornada, el mediodía y las últimas dos horas antes del cierre del comicio. “No creo que sea posible fijar horarios estrictos de votación. Es muy engorroso establecer franjas horarias, no lo estoy descartando, pero digo que me parece muy complejo”, sostuvo.

A todo esto se suma el pedido de la Justicia para que todo el personal que participará del operativo, autoridades de mesa, fiscales y fuerzas de seguridad, esté vacunado. La ministra señaló que es un requisito que “dependerá de cómo avance el cronograma de vacunación”, aunque recordó que en el caso de los docentes -quienes son en su mayoría los que están al frente de las mesas- ya se vacunó a más del 50% y en el caso de la policía bonaerense a más del 30%. Las fuerzas federales están dentro del plan nacional.