El gobierno nacional, la CGT y la UIA avanzaron con los protocolos para reactivar empresas industriales después del 10 de mayo, siempre en ciudades de menos de 500 mil habitantes. Si bien no hay un número exacto ni una fecha inicial generalizada, la elaboración de protocolos de trabajo y transporte bajo las nuevas condiciones de aislamiento físico están en marcha.

El acuerdo tripartito se viene trabajando desde hace un mes. Los empresarios industriales que vieron perjudicada su producción llevaron distintas propuestas al Ejecutivo. Los protocolos de salud laboral son la llave para permitir que distintas jurisdicciones puedan salir de la cuarentena y reactiven la producción.

El análisis de estas propuestas es interministerial, participan el Ministerio de Desarrollo Productivo que encabeza Matías Kulfas, el de Economía de Martín Guzmán y el de Salud que conduce Ginés González García. El análisis final lo llevan a cabo Jefatura de Gabinete y Presidencia. Luego se repite el esquema de las etapas anteriores de llevar adelante la ronda de consultas con el comité de expertos primero, y los gobernadores después. Es que la decisión final está descentralizada en las autoridades de cada una en las jurisdicciones de menos de 500 mil habitantes.

Las jurisdicciones que habiliten la actividad productiva tienen que cumplir con los requisitos establecidos en el DNU publicado la semana pasada. Se espera que el tiempo de duplicación de casos no sea inferior a 15 días, que el sistema de salud cuente con capacidad suficiente, que exista una evaluación positiva de las autoridades sanitarias respecto del riesgo socio-sanitario, que la proporción de personas exceptuadas del aislamiento no supere el 50% de la población y que el departamento o partido no esté definido por la autoridad sanitaria nacional como aquellos que presentan “transmisión local o por conglomerado”.

El ministro Kulfas lo aseguró este sábado en declaraciones radiales: «Se está analizando en el sector industrial qué diferentes plantas pueden empezar a funcionar. Mayo va a tener un incremento importante en la cantidad de actividad que se va a ir incorporando. Si miramos del lado del empleo, un 43% fue lo que estuvo funcionando hasta hace poco tiempo. Después pasamos arriba del 50% y creo que ahora se puede dar otro salto importante en mayo», dijo a CNN Radio y sostuvo que el objetivo del gobierno es «evitar el cierre de empresas y los despidos masivos» en la pandemia. «La actividad económica comienza a tomar de a poquito otro color porque ya se ha habilitado que muchas provincias que no tienen casos, o que tienen todo relativamente controlado, empiecen a abrir, y esto va a generar un movimiento importante».

Kulfas precisó: «Implementamos el Programa de Asistencia en la Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), que va a permitir que el Estado pague la mitad del sueldo de los trabajadores de las empresas que han sido afectadas».

El programa ATP, que habilita al pago del 50% del salario por parte del Estado –según el decreto 376– fue parte de las negociaciones tripartitas entre la UIA, la CGT y el gobierno, que también incluyó el acuerdo empresario-sindical para permitir que quienes no tengan tareas como producto de la cuarentena puedan ser suspendidos y cobren una suma que no podrá ser menor del 75% del salario.

Tras la implementación de normas rígidas, masivas y tempranas por parte del gobierno, pero también por el alto acatamiento de la sociedad, en el Ejecutivo hacen una evaluación muy positiva sobre el lento crecimiento de los contagios de Covid-19 en el país. Destacan que ese balance es compartido por la OMS y las revistas científicas más importantes del mundo. En esa aprobación internacional enmarcan los llamados de los mandatarios Emmanuel Macron, de Francia, y Angela Merkel, de Alemania. La aprobación científica y política internacional funciona como modo de advertencia futura a argumentos contrafácticos sobre si era necesaria la aplicación de una cuarentena con estas restricciones, “para que después no digan que no fue para tanto”.


Raverta, en misión territorial

Fernanda Raverta fue nombrada este sábado oficialmente al frente de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) a través del decreto 429/2020. La primera mujer en encabezar el organismo tiene la directiva de implementar una “gestión mucho más territorial” debido a que “se ha modificado el perfil de la ayuda social en esta emergencia por la pandemia”. “Queremos que toda la ayuda que está poniendo el gobierno llegue de manera efectiva y rápida”, prometieron voceros de la Casa Rosada.