El precandidato a diputado nacional por el Frente de Todos en la Ciudad de Buenos Aires Leandro Santoro continúa su campaña en barrios y con reuniones junto a sectores productivos. Desde el equipo del legislador porteño se muestran contentos con la recepción en las distintas zonas de la Ciudad, incluso en el sector Norte.

Hoy Santoro participó de un encuentro con emprendedores y emprendedoras de Endeavor Argentina. Estuvo acompañado por el vicepresidente del Banco Nación y compañero de lista Matías Tombolini. La semana pasada también estuvo en el Banco Central y con representantes de empresas Pymes. Desde el equipo de campaña sostienen que uno de los ejes de aquí a las PASO es llegar al sector productivo que se vio afectado económicamente durante la pandemia y comienza a reactivarse en estos meses.

Otro de los puntos centrales de la estrategia del candidato de origen radical son los encuentros en barrios y plazas de la Ciudad, algo que desde su entorno evalúan de manera positiva. Sostienen que tiene llegada en aquellas zonas que son afines a Juntos por el Cambio, como Villa Pueyrredón o Villa Urquiza. “Estamos contentos porque son lugares más hostiles y reticentes, pero Leandro es bien recibido. Hay gente que se acerca, que no es peronista o que viene del socialismo, la centro izquierda o independientes. Votantes que antes votaron a Roy Cortina o Lousteau, que ahora están en el bloque PRO. No es votante del núcleo duro del peronismo pero se acerca a la plaza”, indicó un colaborador.

El sábado pasado, Santoro encabezó una charla de filosofía y política junto a Dario Sztajnszrajber en Parque Saavedra. Se acercó más gente de la esperada. Allí apeló a un discurso emotivo que tiene como eje la sensibilidad, la ternura y el humor dentro de la política con pasión colectiva. “Sin pasión no podemos dar la pelea que nos hemos fijado, sin pasión no podemos construir una sociedad con libertad, con igualdad y donde los objetivos sean construir una patria fraterna. Sin pasión no se puede desandar la Argentina del individualismo y no se puede convencer a la mayoría que necesitamos convencer para ganar la Ciudad de Buenos Aires. La pasión significa también ternura y humor. Porque la pasión no se puede sentir individualmente, la pasión se puede sentir de manera colectiva”, afirmó Santoro ese día. 

Desde el entorno del candidato consideran que la pandemia impuso una nueva manera de ver el consumo y el estilo de vida que hay que repensar. Para eso se referencia en el diputado español proveniente de Podemos Íñigo Errejón. “Cómo pensar el barrio donde vivimos  para después cambiar la sociedad. Al revés de lo que se pensaba de ir de lo chico ir a lo grande”, indicaron.

En las semanas que quedan hasta las PASO, el objetivo es seguir recorriendo barrios “sin prejuicios”. El fin de semana estarán en Parque Centenario y Villa del Parque. “Estamos intentando salir de la zona de confort. También estuvimos en La Boca, Parque Patricios y vamos a hacer Parque Chacabuco, Devoto, la Facultad de Derecho, la idea es ir por todos lados”, adelantaron.

En esos encuentros se plantea la figura de Santoro como “pibe de barrio”. La semana pasada hizo una visita nocturna al Hospital Ramos Mejía, en la que hizo una video llamada con el presidente Alberto Fernández. Y el lunes estuvo en la casa de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, que dijo que lo quiere “como a un nieto”.

La agenda climática también es una de los puntos que desarrolla. Mañana se reunirá en el planetario con varias organizaciones ambientalistas de la juventud, entre ellas Jóvenes por el Clima. “Se ve desencanto en los jóvenes, pero hay pibes y pibas que se acercan. El público que más lo sigue es de 30 y pico a 50 años. También hay gente más grande. Se ve en las redes sociales o en la participación de las plazas”, sostienen.

En cuanto a la estrategia mediática, Santoro continúa sus exposiciones en los medios opositores al Gobierno Nacional. También en las redes sociales, donde hoy publicó una foto con el director del SAME, Alberto Crescenti, quién la semana pasada fue criticado por el video en el que le regaló el chaleco que uso durante el rescate en la tragedia de Once, a María Eugenia Vidal. Hoy Crescenti dijo que «no sabía que iban a publicar el video» y Santoro lo calificó como  “uno de los funcionarios más serios y profesionales del Gobierno de la Ciudad”.