La decisión de no convocar a sesiones extraordinarias fue acordada entre el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, el presidente de la Cámara Baja, Emilio Monzó, y el titular del  bloque del peronismo en la Cámara, Miguel Ángel Pichetto. 

El almuerzo que compartieron los funcionarios con el más oficialista de los opositores se llevó a cabo en el Senado de la Nación y se extendió por poco más de una hora. Al término de la reunión, el propio Pichetto confirmó ante los medios presentes que no habrá convocatoria a sesiones extraordinarias porque “no hay ningún tema de urgencia que lo amerite”.

Durante el encuentro, los funcionarios y el senador rionegrino también acordaron que luego de la apertura de sesiones se la dará prioridad tanto a la modificación de la norma que regula el financiamiento de las campañas electorales como a las modificaciones del código penal en cuanto a los delitos que se cometan en un espectáculo deportivo.

El endurecimiento de las penas para los barrabravas se debatirá en la Cámara Baja, mientras que el financiamiento de las campañas comenzará su recorrido parlamentario en el Senado.