El presidente Alberto Fernández y su par de Francia Emmanuel Macron cenaron este miércoles por la noche en la embajada de Francia en Nueva York, junto a representantes de otros países. y conversaron sobre temas de energía y también salidas colectivas para la guerra entre Rusia y Ucrania.

Alberto concurrió a la reunión en calidad de presidente pro tempore de la Celac. Participó el canciller de la India, Subrahmanyam Jaishankar – que visitó en agosto la Casa Rosada y es uno de los apoyos explícitos para que Argentina se integre al grupo BRICS-, además del titular del Consejo Europeo, el belga Charles Michel. Junto a Emmanuel Macron estuvo Catherine Colonna, ministra de Relaciones Exteriores de Francia.

Formaron también parte de la conversación otros líderes de bloques de países, como el líder de la Unión Africana de Países y presidente de Senegal, Macky Sall, quien concurrió junto a su par de Costa de Marfil, Alassane Ouattara, y el ministro de Relaciones Exteriores egipcio, Sameh Shoukry.

Si bien no se comunicaron decisiones concretas, en cuanto a la agenda energética fuentes oficiales confirmaron que más adelante habrá novedades importantes sobre la posibilidad, tan mencionada en los últimos meses con las renovadas inversiones en Vaca Muerta, de que Argentina se convierta en proveedor de gas a Europa.

Respecto de esto último, la búsqueda de paz en el este de Europa tiene relación directa con la provisión de energía, dado el corte total del flujo de gas desde Rusia y la inminencia de un invierno boreal que promete ser duro. La convocatoria de la noche del miércoles tuvo a Alberto Fernández como protagonista ya que es uno de los interlocutores permanentes de Macron desde el encuentro en el G7, de junio de este año, y la bilateral en París.

Las fuentes que participaron del encuentro pudieron precisar que habrá anuncios próximamente, pero por ahora las conclusiones revisten carácter de reservadas. La intención del presidente francés es lograr consenso de las instituciones internacionales para sentar a la mesa de negociaciones a Ucrania y Rusia, algo por el momento difícil. Pero en paralelo el fin de la dependencia de la Unión Europea de la energía rusa ubica en el centro de la escena a la Argentina. En ese doble juego es que Alberto Fernández jerarquiza su rol en la agenda geopolítica.