El ministro de Justicia, Germán Garavano, dijo que «fue una afirmación al menos temeraria» la del presidente de la Corte Suprema de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Eduardo de Lazzari, e instó a que «si tiene conocimiento en particular de las irregularidades de las que habla, se presente ante la justicia para denunciar».

El funcionario nacional se sumó a contrapunto que mantuvo el titular de la Corte con la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, quien también manifestó que el juez De Lazzari debe hacer las presentaciones ante la Justicia.

De Lazzari se había referido a «causas armadas artificialmente, abusos de testigos de identidad reservada, arrepentidos» y a «factores de presión que inducen fomentados y fogoneado por ciertos medios a dictar condenas mediáticas».

Sobre este punto, Garavano dijo en radio La Red que «es una afirmación al menos temeraria de parte del presidente de la Corte, además dijo que eso (lo que denuncia) se estaba replicando en la provincia, con lo cual sería bueno que el presidente explique los alcances de los casos».

«Cuando uno es funcionario público y toma conocimiento de estas cuestiones, lo primero que tiene que hacer es la denuncia en la Justicia», añadió.

Garavano insistió en que lo que «debiera hacer el presidente de la Corte, si tiene conocimiento de hechos de esas características, es denunciarlo, presentarse en la fiscalía y hacer la denuncia correspondiente».

Además, dijo que «lamentablemente es una declaración política» que De Lazzari, «es una persona que proviene de la política», y que es «una pena» que haga esas afirmaciones porque » la Justicia en la provincia está haciendo avances importantes».

Cuando le preguntaron si las afirmaciones de De Lazzari responden a una orientación «kirchnerista», Garavano respondió: «Yo no lo quiero encorsetar en un sector político», pero afirmó que cree que el magistrado «viene del sector del peronismo», aunque como presidente de la Corte «tiene otra responsabilidad».

«Yo lo conozco, de hecho estamos trabajando varios proyectos con la provincia de Buenos Aires, pero fueron profundamente desilusionantes sus manifestaciones, e inadecuadas», sintetizó Garavano.