Según dejó trascender el gobierno nacional, se impulsa desde el ministerio de Defensa reemplazar a la Gendarmería con militares en la custodia de las represas hidroeléctricas y centrales nucleares de Atucha I y Atucha II.

La medida sería a través de un decreto presidencial y surgió a pedido de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a su par del Ministerio de Defensa, Julio Martínez, para poder destinar a esos 1.200 gendarmes que hoy cumplen esa tarea a patrullar el Gran Buenos Aires.

“Es peligroso”, advirtió el ex ministro de Defensa, Agustín Rossi y señaló en diálogo con Radio 10 que “esto es un paso más involucrando paulatinamente a los militares en seguridad interior».

Si bien aún no se conoce el decreto que formalizaría la situación, Rossi consideró que “es una situación que está al límite de la legalidad”, porque “si una usina recibe un ataque, esos militares no pueden actuar» y aseguró que “como mínimo, se va a necesitar del debata parlamentario».

El secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, reconoció que se analiza esa posibilidad ya que se busca “priorizar” la custodia de «la frontera y lugares críticos».

“En la medida que tenemos que poner 3 mil gendarmes en Santa Fe, casi 7 mil miembros de las fuerzas federales en la provincia de Buenos Aires, es evidente para no afectar lo que hemos establecido a principio de año en la frontera, tenemos que disponer personal de Gendarmería que hoy está cumpliendo una función no primaria, importante como el cuidado de los objetivos estratégicos», señaló a Radio 2 de Santa Fe.