“Necesitamos más leyes en el mundo, nunca menos. Creo en el poder del derecho como herramienta para prevenir el delito”. Con estas definiciones como ejes de partida, Fatou Bensouda, la primera mujer designada como Fiscal Jefe de la Corte Penal Internacional , participó del Seminario Internacional denominado “La investigación penal de violaciones a los derechos humanos: Jurisdicción internacional y mecanismos nacionales”, organizado por la Universidad Nacional de Lanús, cuyo Consejo Superior decidió distinguirla con la entrega del Doctorado Honoris Causa.

La Corte Penal Internacional tiene como misión juzgar a personas acusadas de genocidios, crímenes de guerra y de lesa humanidad. En 2011, la Asamblea que representaba los 121 estados que integran la CPI respaldó la designación de Bensouda como Fiscal Jefe.

La abogada nacida en Gambia recibió el diploma de Doctorado de manos de la rectora de la UNLa Ana Jaramillo, en un acto que también contó con la participación de la defensora general de la Nación, Stella Maris Martínez; el director del Instituto de Justicia y Derechos Humanos de la UNLa Gustavo Palmieri; y Vera Jarach, integrante de la Asociación Madres de Plaza de Mayo – Línea Fundadora.

“Me siento muy honrada por esta distinción de la Universidad de Lanús y esto me compromete a redoblar los esfuerzos en mi tarea. Recibir este reconocimiento en Argentina es especial, ya que se trata de un país que ha hecho un aporte muy importante a la jurisprudencia penal internacional con el juicio y condena a las juntas militares de la última dictadura”, remarcó Bensouda. “Para darle Justicia a las mujeres -afirmó- me inspiré a través del impulso de la aplicación de la ley. Creo en el poder del derecho como una potente herramienta para prevenir el delito”, definió.

Por su parte, la rectora Jaramillo ponderó: “Nos congratulamos por la existencia de la CPI para condenar los genocidios . Queremos homenajear a la primera mujer fiscal de la Corte Penal Internacional, de quien conocemos su lucha, su trayectoria, y su defensa de los valores. Sabemos que viene de otro continente saqueado. Por todos estos motivos, le damos la bienvenida a esta comunidad educativa, que no por casualidad es la primera universidad que tiene una carrera de justicia y derechos humanos”.

A su turno, la defensora general de la Nación Stella Maris Martínez enfatizó: “el único modo de que la democracia sea fuerte y permanente, es respondiendo a los golpes de Estado y a los exterminios con una fuerte reacción judicial. Creo que la justicia, aunque muchas veces no está a la altura de lo que se espera, sigue siendo la única solución”, subrayó.