El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, encabezó este lunes una conferencia junto a intendentes oficialistas y de la oposición para anunciar que no realizará más aperturas en la provincia de Buenos Aires en este contexto de aumento de casos y se diferenció así de su par porteño, Horacio Rodríguez Larreta.

“Es un error abrir prematuramente, es un error abrir de más y no estamos de acuerdo. En esta situación no podemos acompañar más aperturas”, sostuvo el mandatario luego de que en la Ciudad se habiliten las reuniones sociales en el espacio público y la apertura de bares y restaurantes, y agregó: “No podemos arriesgarnos a perder en 5 días lo que logramos en 5 meses».

«¿Cómo les voy a explicar a los médicos que mientras no dan abasto nosotros seguimos abriendo actividades? Hacer aperturas precoces puede traer más daño que soluciones», se preguntó.

“No es divisible el AMBA, buen parte de los que trabajan en esos establecimientos viven en la provincia de Buenos Aires. Se van sumando actividades y van generando simbólicamente la imagen de que esto pasó y no pasó”, cuestionó.

Destacó que la situación en el AMBA “es de una estabilidad tremendamente frágil» ya que en los últimos días se consolidó un crecimiento de casos.

“No puede ser que de un lado estemos trabajando para que haya atención médica y del otro lado una porción de la sociedad parece no ver lo que está ocurriendo. Me pregunto si estamos transmitiéndolo mal», manifestó.

“Todos estamos hartos, pero llegó este virus y nos está ganando: todavía no tenemos vacuna ni remedio. No hay que aflojar, si al virus le das ventaja se escapa”, agregó.

Por otro lado, también envió un mensaje de unidad al presentarse acompañado por los intendentes de Lanús, Néstor Grindetti; La Plata, Julio Garro; Quilmes, Mayra Mendoza; Hurlingham, Juan Zavaleta, y de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde. También estuvieron presentes en el Salón Dorado de la Gobernación la vicegobernadora Verónica Magario; el presidente de la Cámara de Diputados provincial, Federico Otermin, y todo su gabinete.

En ese sentido, sostuvo que «no es momento de hacer política», y recordó que la Argentina está en un momento en el que «se necesita de la ayuda de absolutamente todos» al tiempo que cuestionó a «una parte (de la dirigencia) que incentiva y pareciera que busca que la gente se contagie».

«Me eligieron para gobernar y tomar decisiones, no lo voy a hacer con focus group o encuestas sino pensando en el cuidado de la salud», señaló el mandatario y apuntó que «hay discursos difíciles de explicar con la situación actual».