Los sectores conocidos como “los independientes” y “los gordos”, que hoy están encolumnados tras Héctor Daer, aseguran que en caso de un triunfo de Cristina Fernández de Kirchner el próximo domingo la movilización prevista para el 22 de agosto no tendría sentido debido a que el mensaje llegará desde la urnas.

En tanto, los moyanista, que cuentan con el apoyo de la Corriente Federal de los Trabajadores que conduce Sergio Palazzo, sostienen que la movilización debe realizarse igual más allá del resultado de las PASO.

Lo que se deja ver tras la disputa por la movilización que se llevó a cabo esta semana en reuniones personales y cruces telefónicos no es más que la antesala de la disputa por la titularidad de la CGT que se pondrá en juego después de la elecciones de octubre.

Los mismos sectores buscan poner a un único secretario general para enfrentar los dos últimos años del primer gobierno de Cambiemos.

Además, con esa disputa de fondo, la CGT deberá decidir la semana próxima no sólo si ratifica la convocatoria a la movilización sino también si en ese marco se anuncia un nuevo paro general contra la gestión de Mauricio Macri.