Las declaraciones del triunviro, Juan Carlos Schmid, sobre la posibilidad de que la CGT pida que el salario mínimo vital y móvil a 15 mil pesos dispararon las alarmas en el Gobierno que avizoraba una coyuntura de tranquilidad sindical durante la campaña electoral.

El gobierno pretende elevar el salario mínimo en un 20% para llevarlo de $8.060 a $9.720. La necesidad del Gobierno en fijar un techo bajo tiene que ver con que el acuerdo actuará sobre el salario complementario que reciben los trabajadores de la economía popular luego de que se pusiera en vigencia la Emergencia Social. El acuerdo también servirá, según lo estipulado por el Gobierno, como una actualización automática del salario de los docentes que deberán estar un 20% por encima del mínimo.

Hace algunas semanas, antes de que el clima de campaña comenzará a reinar el mundo de la política, los dirigentes sindicales no dudan en señalar que un incremento de entre el 25% y el 30% sería adecuado, más allá de remarcar que los sectores de menores ingresos fueron los más afectados por la elevada inflación de los últimos dos años.

El encuentro que será reservado y que, en principio, se llevará a cabo en la sede del sindicato de Sanidad, está pautado a las 18.  Además del triunvirato están invitados Armando Cavalieri;  Gerardo Martínez, Andrés Rodríguez , José Luis Lingeri, Roberto Fernández  y Omar Maturano.

El acuerdo que se selle marcará el destino económico no sólo de los 200 mil asalariados fuera de convenio, sino de los 400 mil beneficiarios de planes sociales que están alcanzados por la Emergencia Social.  En base a este último punto, la CTEP (Confederación de Trabajadores de la Economía Popular) reclama una silla en la mesa.