Con el ojo puesto en el cierre de listas y la presentación de precandidatos, el Congreso de la Nación comienza una semana en la que el oficialismo tratará de convertir en ley proyectos importantes para el gobierno para luego entrar de lleno en la campaña electoral.

Se espera que ambas cámaras convoquen a sesión especial entre el miércoles y jueves. En el Senado hay un clima de mayor tranquilidad por los escaños que el Frente de Todos pone en juego en noviembre, pero tendrán que limar acuerdos para poder llegar a la unidad en algunos lugares clave del país. Son ocho las provincias que elegirán a sus representantes: Catamarca, Chubut, Córdoba, Corrientes, La Pampa, Mendoza, Tucumán y Santa Fe.

Actualmente, el espacio que preside el formoseño José Mayans tiene 41 senadores y apuesta a que con los resultados de las elecciones generales la composición del bloque sea parecida. “Incluso podemos recuperar la banca de José Alperovich”, comentaron a Tiempo fuentes del bloque.  Desde noviembre de 2019, el tucumano viene extendiendo su licencia sin goce de sueldo tras haber sido denunciado por una sobrina de cometer el delito de abuso sexual.

Ronda la incertidumbre en provincias como Santa Fe. Actualmente el FdT tiene dos bancas que quiere renovar. Pero por ahora no hay un acuerdo de quién encabezará la lista, si Roberto Mirabella, cercano al gobernador Omar Perotti, o la aliada a Cristina Fernández, María de los Ángeles Sacnun.

Otra provincia que se mira con atención es Chubut. El oficialismo cuenta con tres representes desde que Miguel Ángel Pichetto decidió ser candidato a vicepresidente de Mauricio Macri, y el bloque de senadores del PJ se unió con el kirchnerismo eligiendo una nueva cúpula. En tanto, en la provincia de Mendoza, desde la presidencia del Senado ocupada por CFK, hay un particular interés en la renovación de la banca de Anabel Fernández Sagasti. La Cámpora sabe que tiene una elección difícil en Mendoza. El radicalismo gobierna la provincia. Por ahora se estaría trabajando en ampliar el caudal electoral del FdT con la opción de sumar al senador provincial Adolfo Bermejo. 

A partir del acuerdo político entre el kirchnerismo y José Luis Ramón para convertir en ley la ampliación de las zonas frías en el país, beneficiando en la reducción de porcentaje a pagar de las tarifas del gas en todo Mendoza, se especuló con una posibilidad de que el representante de la frazada se uniera a la lista para acceder a una banca en el Senado.  Esta posibilidad quedó totalmente descartada. El mendocino anunció que lanzará su precandidatura el lunes a las 16:30, pero para competir por la renovación de su banca en Diputados, donde es el jefe de uno de los interbloques minoritarios.

En Diputados, el escenario es diferente, y más que un clima de calma se presenta uno de ambición. La aspiración del oficialismo es poder lograr una mayoría que le permita tener quórum propio para depender menos de los acuerdos políticos con los espacios minoritarios y sacar leyes clave como las vinculadas con la reforma judicial, trabadas desde el año pasado en esa cámara. En el poroteo preelectoral, el FdT lleva a cabo negociaciones con aliados que, de renovar su lugar dentro del Congreso, podrían llegar a saltar a las filas del oficialismo. Hay dos diputados en particular,  Ramón, y el randazzista Eduardo “Bali” Bucca. Por ahora es como un juego de póker.