El enemigo no está en la CGT. Está en la Rosada». Esta es la consigna que sirve a los integrantes de la multisectorial del 21F para digerir las derrotas en pequeñas batallas sin desviarse de su objetivo central: la construcción de una base amplia de sustentación para un candidato presidencial competitivo del campo nacional y popular.

La diferencia entre lo principal y lo accesorio está clara para todos los integrantes del armado que se piensa en Santa Marta y que ejecutan los movimientos sociales y un sector del sindicalismo encolumnado detrás de Pablo y Hugo Moyano.

Por eso el revés sufrido por el sector más combativo de la CGT, el último jueves cuando no pudo imponer su voluntad de impulsar el recambio de autoridades, no fue tomado como una derrota. Los dirigentes sindicales enfrentados con el gobierno serán la punta de la pirámide de la construcción que apunta a contener y conducir a los sectores más dañados por la política económica. Se da en un escenario que, presumen, será cada vez más conflictivo socialmente.

La multisectorial que cuenta con la bendición papal y que despliegan el exlegislador porteño Gustavo Vera y Pablo Moyano por todo el país tendrá su relanzamiento nacional el próximo 26 de julio. Ocurrirá en un congreso que se llevará a cabo en la ciudad de Buenos Aires y donde darán a conocer un programa de gobierno que cuenta con 21 puntos. Entre otras cuestiones se recogen las expresiones del Papa Francisco respecto del trabajo, la inclusión y la economía.

El armado que busca ganar volumen político de cara a 2019, y aportar a la construcción de un candidato opositor que pueda imponerse en los comicios, está encabezado por el binomio constituido por Pablo Moyano, secretario gremial de Camioneros, y Sergio Palazzo, titular de La Bancaria. La pirámide se ensancha hasta lograr una base de más de 500 organizaciones en todo el país.

El despliegue territorial y el peso político está garantizado, entre otros, por las dos CTA, la CTEP, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa, sindicatos industriales como la UOM y SMATA, La Corriente Federal de los Trabajadores y el Movimiento de Acción Sindical Argentina (MASA), liderado por Omar Viviani.

La multisectorial ya se presentó en Salta, Mar del Plata, Mendoza, Esteban Echeverría, Rosario, Corrientes, La Plata, Tucumán, Formosa, Misiones, Chaco, Entre Ríos y Chubut. Las presencias de Gustavo Vera y Pablo Moyano se repiten en casi todas las presentaciones. Pero en cada localidad el armado tiene sus propias características y dirigentes. En La Plata, hace poco más de un mes, en el lanzamiento del espacio, se hicieron presentes Omar Plaini, secretario general de Canillitas y secretario administrativo de la CGT; Miguel Díaz, secretario general de Udocba; Miguel Forte, secretario general de Camioneros La Plata; y el diputado nacional por el Frente Renovador Daniel Arroyo, entre otros.

Los 21 puntos del programa de gobierno del Frente Nacional Multisectorial incluyen:  el trabajo como esencia de la dignidad humana, la defensa de la producción nacional, el acceso a los bienes y servicios para los sectores populares, la reformulación de un plan energético sustentable, el desarrollo de la agroindustria, el acceso a la vivienda, la reactivación del ferrocarril para unir las economías regionales, la asistencia sanitaria universal, paridad de género, reforma tributaria equitativa, regulación del flujo de capital y freno a la operatoria de los fondos especulativos. «