El 24 de enero, cuando el presidente Alberto Fernández encabece la VII cumbre de mandatarios de la Celac en Buenos Aires, tendrá dos caminos por delante: concluir la presidencia temporaria que comenzó el año pasado o que sea extendida por los meses que decida el plenario de jefes y jefas de Estado. La cumbre reunirá a 30 delegaciones extranjeras, algunas encabezadas por los presidentes y otras por cancilleres. En el Ministerio de Relaciones Exteriores aseguran que no están buscando una reelección en ese puesto y que respetarán el eventual consenso, pero ante la ausencia de un acuerdo unánime para elegir sucesor, las fuentes diplomáticas reconocen que hay chances de que Fernández podría continuar una parte de este año al frente de la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe.

Apenas Luiz Inácio Lula Da Silva asumió este 1° de enero la presidencia de Brasil por tercera vez, crecieron las especulaciones sobre una posible postulación para presidir la Celac. Hasta ahora Itamaraty no ha formalizado nada. La única nominación confirmada proviene de las Islas San Vicente y las Granadinas, en el Caribe, que promueve a su primer ministro Ralph Everard Gonsalves como titular del organismo. A esa lista corta se suman interesados como el colombiano Gustavo Petro, el panameño Laurentino Cortizo y la hondureña Xiomara Castro, pero ninguno de los tres países formalizó ninguna candidatura, aunque la mandataria es una de las pocas que ya confirmó su presencia en la cumbre.

Quedan dos semanas para el inicio del cónclave y con ese panorama Fernández podría continuar en el cargo. El tema es parte de las conversaciones que viene manteniendo con Lula desde diciembre. Volverán a verse la cara el próximo 23, un día antes de la cumbre, cuando el flamante mandatario brasileño formalice su primer viaje al exterior luego de haber asumido el poder.

Antes que la Celac hay temas más urgentes, como el rumbo del Mercosur luego de los dos intentos de Uruguay de firmar acuerdos bilaterales por fuera del bloque regional con China y con el Acuerdo Transpacífico. Ambos movimientos por ahora no pasaron de la pirotecnia, pero los dos presidentes asumen que tienen que dirimir posiciones sobre el futuro del Mercosur, especialmente ante la posibilidad de profundizar el primer acuerdo comercial firmado con la Unión Europea. Lula dijo en la campaña electoral que buscará ampliar la hoja de ruta firmada en 2018, cuando el presidente temporario del Mercosur era Mauricio Macri. En Buenos Aires hay escepticismo sobre esa alternativa, pero es uno de los temas que comenzará a definir cómo será el vínculo entre Brasil y Argentina tras el regreso del líder del Partido de los Trabajadores, pero de la mano de una fuerza política que excede los límites del PT y que incluye a fuerzas de derecha que se sumaron para evitar la reelección del ultraderechista Jair Bolsonaro.

Todavía no se sabe cómo serán los primeros pasos en política exterior de esa nueva administración y el Mercosur será uno de los primeros exámenes. El otro será el vínculo con Estados Unidos. Luego de pasar por Buenos Aires, Lula viajará a Washington para reunirse con su par estadounidense Joe Biden. Todavía no hay una fecha concreta, pero hay pocas posibilidades de que al brasileño le suceda el padecimiento de su amigo argentino: Fernández lleva más de seis meses confirmando una reunión bilateral con Biden que sigue sin fecha y que algunas fuentes consideran improbable.

Esta semana se abrió otra posibilidad. El embajador argentino en Washington, Jorge Argüello, se reunió en su oficina con el subsecretario para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, Brian Nichols. Le entregó la invitación que Fernández le había prometido a Biden durante la última Cumbre de las Américas en Atlanta, realizada en junio pasado. En ese encuentro el mandatario argentino le propuso a su par norteamericano sumarlo a la próxima reunión de la CELAC. Lo hizo como una forma de rechazar las exclusiones de Cuba, Venezuela y Nicaragua, en su calidad de titular de la comunidad de naciones latinoamericanas.

Queda poco tiempo para las confirmaciones. En el Palacio San Martín algunos funcionarios aseguran que es posible que venga Biden y acepte el convite. Otros consideran que no vendrá ante la mojada de oreja y que enviará a un funcionario. Podría ser el representante especial Christopher Dodd, el mismo que se reunió con Argüello hace dos semanas. Entre todos esos diplomáticos sigue sobrevolando la visita de Estado que pactaron para Fernández y que continúa sin fecha. Hay un aliciente que le da más vida a una bilateral con el mandatario estadounidense. Este año se cumplen 200 años del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre Buenos Aires y Washington, y la conmemoración reflota la reunión de primer nivel que Alberto espera hace dos años.

La invitación a Biden no fue la única que mandó Fernández para esta cumbre en calidad de titular temporario de la CELAC. También se la envió al presidente de China, Xi Jinping, al primer ministro de India, Narendra Modi, y al de Indonesia, Joko Widodo, en representación de la Asociación de Naciones de Asia Sudoriental (ASEAN). El listado sigue con el mandatario de Senegal, Macky Sall, que preside la Unión Africana, al director General de la FAO, el chino Qu Dongyu, y al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. El último es el único que confirmó y los demás mandatarios quedaron en definir el enviado. En ese limbo están los interrogantes sobre el viaje de Biden, que este lunes concretará su primera visita a América Latina desde que es inquilino de la Casa Blanca. Estará en  la Ciudad de México, junto a su par canadiense Justin Trudeau, para participar de la décima Cumbre de Líderes de América del Norte, que tendrá al mexicano Andrés Manuel López Obrador como anfitrión.

La cumbre de la Celac será para Fernández el punto más importante de su agenda internacional durante enero, pero no la única. El 30 y 31 recibirá al canciller alemán Olaf Scholz, que estará en Buenos Aires dentro de una gira que comenzará por Brasil y Chile.

La actividad diplomática comenzará este martes en el Palacio San Martín. El canciller Santiago Cafiero recibirá a su par japonés Hayashi Yoshimasa, que visitará la Argentina dentro de un recorrido por la región.  «