Con más de 300 trabajadores y un arco de referentes políticos, sociales y sindicales, se realizó el encuentro del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas (MNER) en IMPA, la  primera recuperada de la Argentina hace 21 años. Bajo el lema de «ellos la cierran, nosotros las abrimos» los trabajadores del sector autogestionado de todo el país debatieron y decidieron las líneas a seguir de cara al nuevo escenario nacional. “Festejamos que estamos vivos gracias al sacrificio enorme que hicimos para mantener las fábricas. Lo mejor que puede pasar a un nuevo gobierno es que sigamos en la calle exigiendo lo que nos corresponde”, dijo Eduardo “Vasco” Murúa, líder del MNER en el cierre de la jornada que contó con la presencia de la fiscal Gabriela Boquín, Hugo “Cachorro” Godoy, el juez Eugenio Zaffaroni y la ex procuradora Alejandro Gils Carbó, entre otros.

La jornada comenzó con espacios de debate en siete comisiones (feminismos, comunicación, seguridad social, comercialización, emergencias, situación jurídica y educación) que sintetizaron las líneas de acción y los reclamos del sector para la nueva etapa nacional. “Es fundamental compartir estos espacios lugares cotidianamente no solo ante el acto de injusticia sino para sostener un nuevo modelo de organización de las y los trabajadores”, señaló Godoy luego de recibir uno de los mates, el símbolo elegido para reconocer y destacar a las personas indispensables por su compromiso. Roberto Feletti, Vicente Zito Lema, Ricardo Peydró y la Radio Gráfica fueron algunos de los personajes destacados. “El homenaje debería ser para ustedes, para todos estos valientes y estos héroes y heroínas”, recalcó Gils Carbó ante los trabajadores autogestionados. 

Entre las consignas que se resumieron en un plan de acción, quedaron plasmados una  línea de promoción de acceso al papel, una distribución equitativa de la pauta, una presentación para prohibir los cortes de servicios hasta que hasta que haya tarifas diferenciadas, generar una obra social propia y que cada empresa recuperada tenga un espacio de educación y formación, entre otras consignas. “Nos llevamos la tarea y la obligación de cumplir el mandato de este encuentro poniendo el cuerpo donde haga falta. Tenemos que estar unidos por este programa”, dijo el Vasco. 

“En la marcha de los derechos hay avances y retrocesos. Ahora vamos a tener que seguir en la lucha. Pero no hay que deprimirse”, resumió Zaffaroni antes de que la percusión de Tumba Latá invadiera el tercer piso del IMPA. Fue el cierre musical para una jornada en el que la autogestión definió su agenda para el escenario que se viene.